3. Escuchando la voz de Dios (Marcos 5:21-43)
Se nos cuenta la historia de un hombre que recibió un mal reporte, y uno de sus empleados le trajo la mala noticia (vers. 35). Pero Jesús le dijo solo cree, eso quería decir que creyera lo que primero había confesado, (vers. 23); él oyó la voz de Dios y no la voz del enemigo y cuando tu oyes la vos de Dios eres mas que vencedor en Cristo Jesús Señor nuestro.
Y volviendo a nuestro pasaje inicial este centurión estaba seguro que cuando Dios hablaba cosas sucedían, y milagros eran hechos por su mano. Por eso él dijo “di la palabra y mi siervo sanara”. Y estoy seguro y no tengo ninguna duda que cuando digas la palabra, y des la orden, y tu voz se oiga yo creo que mi sirviente va a sanar en ese mismo momento.
Guao dijo Jesús no he visto tanta fe en todo Israel y si usted lo ve en la palabra de Dios en cada ocasión que Dios ha hablado cosas grandes han ocurrido, sino veámoslo en Génesis 1: verss. 3, 6, 9,11,14, 20, 24, 26, 28, 29.
Como aprender a reconocer la voz de Dios: si no tienes una relación con Dios nunca sabrás cuando Dios esta hablándote, eso lo vemos en 1 Samuel 3:3-11, sino conoces a Dios como conocerás su voz en Juan 10:3.
Cuando Moisés salió a ver la Visión de Dios que se le mostraba como una zarza ardiendo en fuego él no conocía a Dios y el Señor le dijo Yo soy el Dios de tus padres, el Dios de Abraham, de Isaac, y de Jacob, tu sacaras a mi pueblo de Egipto con poder porque yo voy contigo, pero quien eres dijo Moisés, como te llamas, que diré a los hijos de Israel cual es tu nombre, YO SOY EL QUE SOY, así dirás a los hijos de Israel yo soy me envió a ustedes.
Por ejemplo cuando yo llego a mi casa no importa la hora, que yo llegue, yo solo golpeo la puerta, y preguntan, ¿quien es? Y respondo yo soy, y salen en carrera abrirme la puerta porque me conocen y tengo una relación con mi esposa y mis hijos. Es importante saber que cuando Dios habla cosas grandes empiezan a suceder. Éel saco al pueblo de Israel de Egipto con mano poderosa y fuerte porque ante el poder de Dios quien podrá mantenerse en pie.
Conclusión:
Cuando Dios habla, no hay quien resista, cuando Él habla sana, cuando Él habla liberta, cuando Él habla los demonios tiemblan y tienen que huir. Cuando Él habla cosas grandes empiezan a suceder, porque Él llena con su gloria su casa.
Yo desato por la palabra de Dios Su gloria, declaro milagros, desato el poder de Dios sobre esta casa, y hablo a las ovejas fructificaos y multiplicaos. Y declaro que estas ovejas son ovejas fértiles quemo toda esterilidad, oye la voz de Dios recibe tu milagro hoy.
Recibe el poder de Dios sobre tu vida, te declaro prosperidad, bendición recibe hoy, escucha la voz de Dios y recibe, recibe de Dios hoy amen… gloria a Dios, aleluya gracias Espíritu Santo Amen, Amen.
© Bayardo Antonio Guadamuz. Todos los derechos reservados.
