¿Eres tu discípulo de Jesus?

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Predicas Cristianas | ¿Eres tu discípulo de Jesus?

La vida de un discípulo

La vida de un discípulo es un estudio con el propósito de mostrar bíblicamente la respuesta que Dios y Jesús quieren de nosotros ante la cruz. El llamamiento está en la cruz, pero nuestra respuesta a Dios, reflejada en nuestra forma de vivir, es el punto central. No se trata solo de sentimientos o emociones fuertes al ver a Jesús en la cruz, porque si no va más allá de una emoción, no sirve. Dios no quiere que seamos emocionales únicamente; Él quiere que vivamos firmemente su Palabra.

Mateo 28:18-20

El último encargo que Jesús dio a sus discípulos fue un reto, un mandato, un encargo de Dios. Él cumplió su misión, y ahora es tarea de sus discípulos. ¿Cuál es el deseo principal de Jesús? Que seamos fieles y responsables de llevar su mensaje a todas las naciones. No solo en lugares lejanos, sino también en nuestra propia ciudad, en nuestro vecindario.

¿Cuál fue el propósito de Jesús? ¿Iniciar una religión? ¿Hacer reuniones los domingos? No. ¡Su propósito fue iniciar un movimiento mundial!

¿Cómo un discípulo puede cumplir su propósito?

Once hombres recibieron un reto: evangelizar el mundo entero. La única respuesta es imitando y siendo fieles a Jesús. Si sientes presión con la evangelización, es porque no estás imitando a Jesús. La única forma en que podemos evangelizar el mundo es multiplicándonos y estando comprometidos. No debemos esperar tener un cargo o título para ser multiplicadores.

Todos trabajaron, sufrieron, fueron perseguidos y recibieron el premio. No te conformes con ser un discípulo pasivo, pensando: “Yo solo voy a asistir a mis reuniones, pero no compartiré mi fe, no quiero discipular a alguien.”

¿Quiénes pueden bautizarse?

Según Jesús (Mateo 28:19), solo los discípulos, personas que ya han visto el costo y han decidido seguirlo. No es simplemente un chapuzón en el agua, sino que el bautismo debe respaldarse con una forma de vida. Un infante no sabe lo que va a seguir, nadie puede tomar esa decisión por él.

Hechos 11:25

¿Cuál es la diferencia entre un discípulo y un cristiano? Bíblicamente, discípulo y cristiano son lo mismo. La palabra cristiano aparece tres veces en la Biblia, mientras que discípulo aparece más de 260 veces. Cuando se empezó a usar la palabra cristiano, el movimiento de Jesús ya tenía entre ocho y diez años.

Cristiano significa “pequeño Cristo”. En sus inicios, era un término despectivo. Hoy, por todos lados llaman “cristianos” a las personas, pero ¿su forma de vivir respalda ese título?

Discípulo significa seguidor, aprendiz. En la universidad, en el trabajo, en cualquier entorno, hay discípulos de un maestro o líder. De la misma manera, un cristiano es un discípulo de Jesús, un aprendiz, un seguidor en términos bíblicos.

¿Soy salvo porque soy cristiano?

Si no eres discípulo de Cristo, no eres cristiano ni eres salvo. ¿Quién inició el movimiento? Jesús. ¿Quién debe determinar quién es quién? Solo Él. Sin embargo, el hombre ha decidido que solo creer en Él es suficiente, pero Jesús enseñó que un discípulo es aquel que vive la vida que Él enseñó.

Si dices ser cristiano, muéstralo con tu vida.

Marcos 1:16-20

Características de un discípulo desde el principio:

  • Seguidores de Jesús
  • El enfoque no es ser como las personas de nuestra iglesia, ni hablar como ellas, sino enfocarnos en Jesús. Debemos conocer su vida a profundidad, amarlo e imitarlo.

Pescadores de hombres

Nuestra misión es salir y traer a otros a Jesús y su enseñanza. Un discípulo debe evangelizar en su barrio, en su trabajo, en su universidad.

¿Por qué debemos hacerlo? Porque Jesús así lo enseñó.

¿Cómo es un pescador?

  • Día 1: No pesca nada.
  • Día 2: No pesca nada.
  • Día 3: ¿Se rinde? No, sigue intentándolo. No importa si llueve o si hace mucho sol, él sigue intentando. Al final, atrapa el pez más grande.

De la misma manera, un pescador de hombres no siempre verá frutos de inmediato. Algunos lo rechazarán, dirán que no les interesa. Pero si perseveras, si luchas, lo lograrás.

Un pescador vive para pescar; su ropa, sus manos y su hogar huelen a pescado. Su vida es la pesca.

Un pescador de hombres está enfocado en salvar almas. Su vida es vivir como Cristo. Un profesional vive para su trabajo, su enfoque está en el dinero, en subir en su carrera. Un discípulo vive para salvar almas.

¿Qué nos llevamos cuando morimos? ¿Dinero, vehículos, casas? ¡No! Un discípulo sí se lleva algo: almas al cielo, personas a quienes ayudó a creer y seguir a Jesús.

La vida de un discípulo tiene un propósito mayor que cualquier profesión. Un discípulo trasciende a la vida eterna.

Lucas 9:23-26

Jesús ofrece el camino al cielo, pero no cualquier camino.

“Si alguno quiere…” No es obligatorio, no se nace siendo discípulo. Es una decisión personal.

“Olvídese de sí mismo…” No vivir por uno mismo. ¿Para quién vives hoy? No te engañes, si no eres discípulo de Jesús, vives para lo que consideras más importante: tu egoísmo, tus deseos, tus intereses.

Jesús quiere eliminar todo eso.

“Cargue con su cruz y sígame…” Significa estar dispuesto a morir por Él.

En el primer siglo, ser cristiano implicaba persecución y muerte. Hoy, en algunas partes del mundo, hay quienes están dispuestos a sacrificarlo todo por su fe. ¿Y qué hacemos nosotros por Jesús?

Jesús nos dice que calculemos el costo antes de decidir. Si decides ser su discípulo, no hay marcha atrás.

Esto no es una moda cristiana, no es un capricho. Es algo serio. Si empiezas, terminas. En la mafia, cuando entras, no puedes salir. Ellos lo toman en serio. ¿Cómo es posible que quienes seguimos a Jesús no lo tomemos en serio? No se trata de entrar y salir cuando queramos. ¡O es Jesús o es aquello que te impide seguirlo!

Lucas 11:1-10

“Señor, enséñanos a orar…” Los discípulos querían aprender y crecer.

Un discípulo tiene metas altas, busca mejorar cada día. Esta es una característica fundamental.

“Danos el pan de cada día…” Vivir con Jesús es un estilo de vida diario.

¿Eres un discípulo o solo un cristiano de nombre?

¿Eres salvo? ¿Quieres ser un discípulo? ¿Qué necesitas hacer? No basta solo con creer; hay que ser fiel a lo que Jesús enseñó.

Este es el momento de empezar a ser pescadores de hombres.

© Humberto Alonzo. Todos los derechos reservados.
Ministerio:Iglesia Internacional de Cristo

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