Liderazgo integral

II. Los principios absolutos del liderazgo

Un programa personal claro que contenga metas a largo plazo, así como estrategias y objetivos a corto plazo. La planificación profesional de alguien que quiere triunfar no se deja al azar. Establecer planes en términos que todos entiendan (¿qué realmente quiere?)

El programa debe estar enunciado en unas pocas frases que pueda repetir en cada oportunidad que tenga. o Las metas enunciadas en el programa deben ser comprensibles y mensurables.

Una filosofía personal. Aprender la lectura (de la Biblia y buenos libros) puede ayudar a aprender lo que es verdad así como lo que no es. Aplicar lo que aprendes significa caminar en una buena dirección a lograr las metas. 

Asegúrese plenamente de que alguien esté a cargo de cada tarea. De ese modo, cuando desee saber cómo van las cosas sólo tendrá que preguntar a una persona.

Innovar. Debe nacer del inconformismo. Si haces las cosas de la misma manera vas a conseguir los mismo resultados. Podremos innovar si aprendemos a ver las cosas en términos del resultado que se requiere tener.

Decidir. Aprender e innovar de nada sirven si no se toman decisiones.

Relaciones duraderas. Para conservar una relación, debemos conocer a la otra parte en una forma positiva y eso requiere de un esfuerzo de nuestra parte. Las relaciones implican una atención continua.

Universalidad. Significa saber aprovechar todas las oportunidades que se nos presente. Comprender el mercado universal propio. Saber bien la gran comisión. Aprender a respetar y mostrar respeto por las personas.

III. El desarrollo de líderes

Los que tienen mando muchas veces son nombrados y no elegidos (ocurre en nuestros trabajos). Por ello son leales a quienes los nombrados y no a quienes son asignados a dirigir. 

Muchos de nosotros acabamos por ser dirigidos por individuos que no sirven para esa labor. Los verdaderos líderes de una organización pueden no tener títulos en la puerta de una oficina, ni andan por allí diciendo que tienen un cargo alto en la iglesia.

Siempre hay lugar para el liderazgo y éste se percibe en todo los niveles Cp. Hechos 9:1-17. Ananías (Cristiano de Damasco que cura y bautiza a Pablo). Muchas veces, quienes llegan a ser lideres eficaces no saben de antemano que poseen lo que se necesita para ello.

  • Felipe el evangelista
  • Hechos 6:3-6 Uno de los 7 varones de buena reputación
  • Hechos 8:4-8 Evangelizó Samaria. 8:12-13 Simón el hechicero creyó
  • Hechos 8:26-39 Bautizó al Eunuco Etíope
  • Hechos 21:8 Dios lo recompensó con cuatro hijas profetizas.

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