Devocionales Cristianos – Mensajes Cristianos
Esta parábola del libro de Lucas capítulo 13 versos del 5 hasta el 15 es muy interesante y puede servir como un espejo a cada persona a manera de ubicarse en que grupo de personas se encuentren. La persona es el lugar .
Si quieren entender lo que se va a explicar quisiera que leyeran eso primero, de lo contrario no le hallaran mucho sentido por lo que deben invertir tiempo en sus móviles o en su biblia si es que tienen una cerca.
Esta parábola trata de un sembrador que va a su labor cotidiana, va a sembrar la semilla al campo, pero parte de las semillas que esta por sembrar algunas de ellas caen en 3 diferentes lugares y la últimas cae donde realmente debe caer.
La semilla que el no sembró, si no que se cayó junto al camino es un tipo de lugar, donde pasan las carretas, personas caminando y obviamente no va a poder crecer esa semilla en dicho lugar, luego cayó esa semilla sobre algunas rocas y allí no es lugar para crecer una planta pero tal vez algún tiempo viva pero morirá pronto sin dar fruto.
Luego la semilla que cae en el otro lugar que es entre los espinos, tampoco es un lugar que un campesino sembraría porque sería pérdida de tiempo, pero esa semilla cayó en dicho lugar y también esa semilla que casi había encontrado un lugar para nacer y nace pero esos espinos la terminan ahogando sin lugar a duda, quitándole la luz del sol, oxigeno y enmarañada quedara que no podrá seguir creciendo (placeres de la vida, preocupaciones y riquezas) cuando estaba en el lugar casi perfecto vemos que no era lugar indicado y además este no es el lugar que un campesino siembra la semilla por su voluntad.
Llegó al último lugar allí el campesino pone la semilla y esa era la tierra esperada para hacer el sembradío y que paso? La semilla no tenía obstáculos, lo único que podría suceder es que nazca y lleve fruto por el tipo de suelo, por eso la semilla, algunas dieron fruto al 30% otras al 60% y las otras al 100%! Vean bien : todas las que fueron sembradas dieron fruto no importando la cantidad, daban fruto, seguían dando fruto, los primeros 3 lugares donde cayó pero no fue sembrada esas murieron por no ser lugares adecuados para sembrar semillas.
Cada persona es un lugar de recipiente donde cae la palabra de Dios y cada uno al ver estos lugares puede saber que lugar es y ponerse al descubierto y no pretender autoengañarse aun cuando fuere a una iglesia, si ve que la Biblia no le dice nada, no siente aquella pasión por la palabra de Dios, ni siquiera por vivir de acuerdo a la palabra y menos para compartir esa palabra entonces puede ubicarse en su lugar.
Si Ud es de los que da frutos dignos de arrepentimiento y vivimos de una forma diferente al mundo, donde expresamos ese amor dado desde el cielo a nosotros y ahora nosotros lo damos a otros entonces la semilla cayó en buena tierra .
¿Eres camino, roca, espinos, o la buena tierra preparada donde cayó la semilla?
El sembrador viene por la cosecha de esa siembra que hizo, encontrará en el lugar de su siembra por seguro, no en los lugares donde cayó desparramada la otra semilla, pero era testimonio que solo puede crecer y dar fruto en la tierra preparada para su fin, de lo contrario los otros terrenos sólo son perdida de tiempo y muchos viven en esos terrenos y no se han dejado labrar y preparar para ser una tierra preparada y lista para recibir la semilla que es la Palabra de Dios y dar fruto, más fruto y mucho fruto! Este es el objetivo final: el fruto para poder dar testimonio de la planta y ahora el sembrador puede sacar provecho de su trabajo arduo y prometedor.
“…para que andéis como es digno del Señor, agradándole en todo, llevando fruto en toda buena obra, y creciendo en el conocimiento de Dios…” Colosenses 1:10
© Mauricio Loredo