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Discipulado Nº 34. Un tesoro viejo y uno nuevo

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DISCIPULADO Nº 34. CADA DISCÍPULO TIENE UN TESORO VIEJO Y UNO NUEVO.

Mateo 13:52El les dijo: Por eso todo escriba docto en el reino de los cielos es semejante a un padre de familia, que saca de su tesoro cosas nuevas y cosas viejas”.

CADA DISCÍPULO TIENE TANTO UN TESORO VIEJO COMO UNO NUEVO.

Vamos a hacer énfasis para finalizar esta parábola en la última parte de este versículo: “Saca de su tesoro cosas nuevas y cosas viejas”.

El mensaje fundamental de esta parábola es una exhortación a los discípulos a usar el conocimiento que habían adquirido acerca del reino de los cielos para el beneficio de otras personas. Si ustedes han entendido estas verdades, las deben enseñar.

Fijense bien que dice “Saca de su tesoro”, es decir que no lo acumula; sino que lo comparte.

Este padre de familia que toma de todo cuanto ha atesorado para suplir las necesidades de la familia, nos enseña que no debemos acaparar o guardar, ni lo viejo, ni lo nuevo que adquirimos; sino que debemos sacarlo para el beneficio de la familia según la necesidad.

El tesoro claramente es la verdad de la Palabra de Dios que el discípulo (el escriba docto en el reino de los cielos) aprende. Es probable que las cosas NUEVAS y VIEJAS se refieren a las enseñanzas antiguas que ya había recibido de la ley de Dios (el Antiguo Testamento) y las nuevas que estaban aprendiendo de Cristo (el Nuevo Testamento). No hay ninguna contradicción entre lo antiguo y lo nuevo. En ambos casos se trata de la Palabra de Dios. De hecho lo antiguo, correctamente entendido, ayuda a comprender lo nuevo.

Los principios que Cristo enseñó sobre el reino de los cielos no contradicen los principios presentados en el Antiguo Testamento. Contradijeron las interpretaciones equivocadas y las tradiciones de los escribas y fariseos de Su tiempo. Pero cumplieron lo dicho en el Antiguo Testamento. Así que el escriba que es realmente docto en “el reino de los cielos” tomará aquellos principios de ambos pactos y los enseñar para el beneficios de los demás.

Frecuentemente cometemos un error semejante al de los religiosos del tiempo de Cristo. Creemos que el Nuevo Pacto contradice el Antiguo. Esto no es cierto. Es cierto que ya no estamos bajo el sistema de ley presentado en el Antiguo. Pero este cambio también está de acuerdo con el propósito y las profecías del mismo Antiguo Pacto.

Los principios fundamentales del Antiguo Pacto: La fe, la sinceridad, el amor, la obediencia de corazón todos son tesoros viejos que usamos también en el Nuevo Pacto. El escriba verdaderamente “docto en el reino de los cielos” sabe sacar de su tesoro estas enseñanzas nuevas y viejas y las ENSEÑA fielmente para el beneficio de los demás, especialmente para suplir las necesidades de la familia.

La verdad encomendada a sus discípulos ha de ser comunicada al mundo. Y al impartir el conocimiento de la verdad, éste aumentará.

El escriba Esdras nos motiva a imitarle. Esdras 7:10Porque Esdras había preparado su corazón para inquirir la ley de Jehová y para cumplirla, y para enseñar en Israel sus estatutos y decretos”.

Nosotros como sus discípulos debemos preparar nuestros corazones para buscar la Palabra, para hacerla, y entonces enseñarla.

Tu eres ese discípulo de Jesús que desde que te convertiste has adquirido un montón de conocimiento viejo de las Escrituras y también nuevo, saca y usa ese tesoro en favor de otros; no solo eres rico en conocimiento, sino también en experiencias, compártelas, predica la palabra a tiempo y fuera de tiempo y vas a ver cómo el Reino de Dios se extiende por toda la tierra y Dios te usará como nunca antes lo has hecho.

© Moreiba Cabrera. Todos los derechos reservados

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1 comentario en «Discipulado Nº 34. Un tesoro viejo y uno nuevo»

  1. Hola buenas noches, acabo de bajar la aplicación y me gusto el discipulado. Solo no encuentro los números anteriores al 33 y 34. Quiero discipular a mi familia con esta doctrina, es de mucha bendición para nosotros. Muchas gracias y bendiciones.

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