Templos de Dios

Presentarse delante de Dios (Romanos 12:1)

Pablo le dice a los romanos que presenten ante Dios sus cuerpos como sacrificio vivo. Debemos presentar ante Dios y dedicar nuestro cuerpo solo a obedecer, obedecer los deseos del Espíritu. Debemos dejar todas las obras de la carne que se mencionan en su palabra y solo satisfacer al Espíritu Santo. 

Con la ayuda de Dios todas las cosas son posibles. Poco a poco, conforme vamos muriendo para nosotros, empieza a vivir ese Espíritu de Dios dentro de nosotros y no es más difícil vivir para Dios. Poco a poco se vuelve algo natural pues el Señor obra en nuestro interior y por su poder podemos ser santos.

Seamos imitadores de Dios y presentemos nuestro ser como ofrenda delante de Dios. Vengamos ante su presencia y dediquemos nuestra mente, nuestro cuerpo y todo nuestro ser para su servicio. Sin dejar ninguna reserva para nosotros mismos, todo debe ser del Señor. Esto subirá ante su presencia como un olor grato.

Dios se goza cuando nos dedicamos a servirle, cuando le obedecemos y sacrificamos nuestro ser para obedecerle a Él. Es entonces cuando Él manifiesta su poder en nosotros y podemos ver sus obras sobrenaturales. 

No nos contaminemos

Mantengamos pues este templo de Dios en santidad. Sometámonos a Dios constantemente y vengamos ante su presencia pidiendo perdón por nuestras faltas. Dice su palabra que es fiel y justo para perdonarnos de toda maldad. 

Constantemente examinémonos delante de Dios y pidamos que nos ayuda a permanecer siempre santos para Él. Desechemos todo lo malo y así permanezcamos en santidad para Dios. Debemos alejarnos de todo aquello que a Dios no agrada y acercarnos a todo aquello que nos lleve al Señor.

Conclusión 

Nuestro Dios es Santo y nosotros, sus siervos, seamos santos. Alabemos, adoremos al único y sabio Dios. Adoremos y rindamos todo nuestro ser al único que lo merece. Hasta que podamos decir como Pablo, ya no vivo yo, sino Cristo vive en mi.

Hasta que podamos decir que hemos muerto a nosotros mismos y ahora vivimos sólo para Dios. Si esto hacemos Dios nos recompensará, nos dará la fortaleza para que esto sea posible y veremos su gloria. Lo sobrenatural de Dios está ahí, en obedecer y rendirse totalmente a Él.

© Mauricio Alvarez. Todos los derechos reservados.

Central de Sermones… Mensajes Cristianos

Deja un comentario