Hoy en día queremos que todo sea rápido pues estamos acostumbradas a lo fácil, siempre queremos que Dios nos conteste fugazmente y aun en la espera esta la respuesta. Dios hablo a Moisés después de 40 años en el desierto, él nos hace esperar para quitar de nosotras todo aquello que no es de su agrado. El tallador trabaja el material para sacar la más exquisita pieza Dios no talla vidrio, solo piedras preciosas.
El silencio de Dios
El silencio de Dios no significa que él no está sino que está trabajando en nosotras (limpiando nuestras vidas).
En nuestras vidas contamos a diario con alguien que nos prepara, nos orienta, es nuestro mejor amigo, nuestro entrenador es el Espíritu Santo.
Conoceremos más a Dios cuando aprendamos a esperar más en El. Dios nunca llega, él siempre está, nosotras somos las que no le hallamos porque no le buscamos. Debemos aprender a esperar en Dios. Ester supo esperar y narra las escrituras que transcurrido este tiempo de preparación se presentó ante el rey el cual la amo más que a todas las demás mujeres y hallo gracia delante de sus ojos.
El Señor nos prepara para librar batallas, pero nadie va a la batalla sin la preparación necesaria. Él quiere que tú obtengas la victoria, él quiere que tú seas más que vencedora por eso es necesario en este periodo saber esperar
2. Una mujer de Dios es agradecida
Dios demanda de nosotras como princesas de Dios que seamos agradecidas por lo que él nos da a diario, pero que hacemos, siempre nos quejamos. La mejor manera de tener intimidad con Dios es estar a sus pies, presentarnos con corazones agradecidos por todo lo que él nos da.
Si hoy estas pasando por alguna dificultad no importa agradece a Dios pues él está moldeando tu carácter.
“Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados.” Romanos 8:28
Las palabras de Dios son sí y siempre amen busquemos las respuestas de Dios y veremos sus bendiciones, es este proceso que tiene que haber un corazón agradecido aunque no entendamos los propósitos del Señor. Dios te forma n medio del problema así aunque seamos débiles él nos hará fuertes.
Debemos aprender a dar gracias a Dios en todo aun desde el pasillo, aunque no veamos todavía las puertas abiertas agradece por lo que el hará. Sus propósitos son mejores que todos tus planes.
“Jehová cumplirá su propósito en mí” Salmo 138:8
Solo agradece a Dios en todo.
Me encanta este libro de Esther, porque muestra que Ester es una mujer valiente, llena de la gracia de Dios.