Mensajes Cristianos
Prédica de Hoy: Responsabilidad generacional
Mensajes Cristianos Texto Bíblico: Deuteronomio 6
Introducción
RESPONSABILIDAD SOBRE NUESTRAS GENERACIONES:
Responsabilidad activa:
Deuteronomio 6 más que suavizarnos sobre sugerencias para un buen vivir como el día de hoy la sociedad nos inunda. Dios en su palabra es tajante y ordena que nuestra responsabilidad sobre nuestros hijos deber cumplirse en forma activa y constante. Palabras como ESTANDO, ANDANDO, CUANDO… nos lo confirma.
Responsabilidad sobre nuestro corazón:
Sin embargo, el hecho de tener responsabilidad sobre nuestros hijos respecto a transmitir el temor de Dios, debe procurarse en una atmósfera y ambiente totalmente gobernado por Dios.
Deuteronomio 6.5-6 comienza en el eje de la familia que es el padre. Él primeramente debe ser revestido del amor de Dios y abrigar en su corazón un temor reverente y gravar la ley en él para tener la capacidad de instruir en el marco y bajo los principios de AMOR que Dios establece, ¡antes NO!
“5 Ama al Señor tu Dios con todo tu corazón y con toda tu alma y con todas tus fuerzas. 6 Grábate en el corazón estas palabras que hoy te mando. 7 Incúlcaselas continuamente a tus hijos. Háblales de ellas cuando estés en tu casa y cuando vayas por el camino, cuando te acuestes y cuando te levantes.“
Proverbios 18.20-22 nos habla de la riqueza que se obtiene al ser impregnados de Dios y en consecuencia, nuestra familia será objeto de bendición, por ello, la primera responsabilidad ante nuestras generaciones es ennoblecer nuestro corazón.
Responsabilidad aceptada y respaldada por Dios:
Génesis 28.3 y Génesis 35.11 nos confirma cómo es que Dios respalda y honra la bendición de un padre de familia con un corazón noble.
28:1-3 “Isaac llamó a Jacob, lo bendijo y le ordenó:—No te cases con ninguna mujer de aquí de Canaán. 2 Vete ahora mismo a Padán Aram,a la casa de Betuel, tu abuelo materno, y cásate allá con una de las hijas de tu tío Labán. 3 Que el Dios Todopoderoso te bendiga, te haga fecundo y haga que salgan de ti numerosas naciones.“
35:9-11 “Cuando Jacob regresó de Padán Aram, Dios se le apareció otra vez y lo bendijo 10 con estas palabras: «Tu nombre es Jacob, pero ya no te llamarás así. De aquí en adelante te llamarás Israel». Y, en efecto, ese fue el nombre que le puso.11 Luego Dios añadió: «Yo soy el Dios Todopoderoso. Sé fecundo y multiplícate. De ti nacerá una nación y una comunidad de naciones, y habrá reyes entre tus vástagos.”
Responsabilidad sobre nuestro hablar:
Eclesiastés 7.9 Nos muestra que una alma en constante enojo es capaz de heredar y transmitir maldición a generaciones completas. De allí el cuidado de buscar vivir una vida gobernada por Dios para evitar ruina a nuestra generaciones.
“No te apresures en tu espíritu a enojarte; porque el enojo reposa en el seno de los necios.“
Lo más lamentable y ruin que podemos hacer es abrigar enojo y maledicencia en el hogar, la consecuencia es funesta; este enojo reposará en el seno de la familia y se traslapará a generaciones siguientes. Pedro en sus epístolas 1ª Pedro 3.10 toma la referencia del Salmo 34 y declara: Si quieres ver días buenos en tu vida, refrena tu lenga del maldecir y tus labios de hablar engaño. Apártate del mal y haz el bien; busca la paz y síguela.
Un alma atada al enojo nunca podrá hablar verdad, será segada por el engaño y actuará en consecuencia. ¡Líbrenos Dios de una vida gobernada por el enojo! Por ello, Dios nos da la oportunidad hoy de recapacitar y corregir nuestro actuar apartándonos del mal, buscando en todo momento un ambiente de paz que solamente Dios nos puede dar y continuar por ese camino con él.
Responsabilidad de formación del corazón:
Proverbios 16.32 Nos invita a formar responsablemente un espíritu en nuestros hijos de alto rendimiento, antes de formarles un intelecto firme, pero necio a la vez.
“Mejor es el que tarda en airarse que el fuerte; Y el que se enseñorea de su espíritu, que el que toma una ciudad.“
Conclusión
Para que nuestras generaciones vivan quieta y reposadamente es necesario que su corazón se amolde a Dios y no se amolden a las corrientes de este siglo. Ellos no se formarán en la iglesia, tampoco en prédicas en línea. Ellos se formarán cuando estemos con ellos, andemos con ellos y vean cómo nos conducimos frente a los demás. La iglesia y las prédicas en línea serán solamente una confirmación de los que viven en casa, no una utopía y contradicción.
Oración: Señor, enséñanos a ser responsable con nuestras generaciones, que primeramente nuestro corazón sea noble ante ellos, nuestras palabras sean honradas y confirmadas por ti. Aléjanos de un espíritu en constante enojo y revístenos de tu paz de tal forma que el espíritu de nuestras generaciones estén alineadas a tu presencia.
© Eduardo Cavazos Cavazos. Todos los derechos reservados.