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La costilla de Adán

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Predicas Cristianas Predica de Hoy: La costilla de Adán

Predicas Cristianas Lectura Bíblica de Hoy: Génesis 2:18; Romanos 5:14, 19; Efesios 5:31-32

INTRODUCCIÓN:

¿Sabía usted que antes que el hombre descubriera la ciencia de la clonación ya Dios la había usado con Adán al sacar una costilla y clonar a una mujer que llamó Eva? ¿Por qué Dios clonó a Eva de la costilla de Adán?

Alguien lo ha definido diciendo que fue hecha de allí y no fue hecha de su cabeza para que ella no tuviera dominio sobre él; ni de sus pies, para no ser pisoteada por él; sino de su costado, para ser igual a él, de debajo de su brazo para ser protegida, y de junto al corazón para ser amada.

En el campo científico se sabe ahora que las costillas fueron puestas en nuestro cuerpo para proteger los órganos vitales, tales como los pulmones, hígado, riñones y el corazón. De esto se puede deducir que el hombre puede vivir sin una costilla, pues no es un órgano vital, pero dejará desprotegido a sus órganos vitales.

En la sabiduría divina él había dicho: “No es bueno que el hombre esté solo”. Fue por esto que la operación de extracción de la costilla de parte del “cirujano divino” tendría como propósito hacer un ser que viniera de la misma sustancia del hombre.

Que reflejara su propia naturaleza, que fuera, como en efecto lo diría después Adán, “hueso de mis huesos, y carne de mi carne”. Pero, ¿qué se escondía detrás de este hecho creativo?

Pues que en esa “clonación” divina había un “tipo” que tendría su “antitipo” en la iglesia del Señor. Un estudio comparativo nos lleva a descubrir cómo la “costilla de Adán” llegó a ser figura de la iglesia del Señor.

Que así como Dios puso sueño profundo en Adán y sacó la costilla, así también Dios sacó del sueño profundo de su Hijo “la costilla” con la que formó a su iglesia. Observe que el costado de Jesús fue traspasado. Justo allí donde estaban sus costillas. Consideremos, pues, la costilla de Adán como un tipo de Cristo.

I. LA SOLEDAD DE ADÁN TIPIFICA A CRISTO EN SU ENCARNACIÓN POR SU IGLESIA

a. Adán solo en el paraíso (Génesis 2:18).

Esta es una de las figuras extraordinarias del paraíso donde fue puesto Adán en su creación. Dios descubrió que ninguno de los seres creados podía servir de compañía para su hijo Adán.

Era necesario que alguien de su misma naturaleza pudiera llenar la soledad de la cual fue objeto. Ahora pensemos en esto. Si Adán es un tipo de Cristo, ¿podemos hablar de la “soledad” de Jesús también? ¿Cómo explicar que Jesús necesitó de una “ayuda idónea” para su propio ministerio?

Bueno, desde el punto de vista de los planes eternos, Dios también había provisto para su Hijo de alguien que en la figura de Eva sería llamada la iglesia. Adán tipifica a Dios, el verdadero marido universal.

Dios estaba solo antes de hacer al hombre y aunque él es absolutamente perfecto, no obstante, sin la iglesia él está incompleto. Sin la iglesia él es como un esposo sin esposa o una cabeza sin cuerpo.

Por consiguiente, cuando Dios dijo que no era bueno que Adán estuviese solo era porque Adán necesitaba una esposa, y eso describe la necesidad que tiene Dios de conseguir un complemento. Dios necesitaba de una “esposa”.

b. “Adán, figura del que había de venir” (Romanos 5:14).

Pablo acertadamente nos ha dicho que Adán era “figura” del que iba a venir después, esto es Cristo. De aquí se desprende que Adán y Cristo son presentados como los dos hombres esenciales de la historia humana, como las dos figuras que representarían a la raza humana.

Es por eso que se hable “de el primer Adán” y “de el segundo Adán”. ¿Por qué Adán es la primera figura de Cristo? Por un lado lo es en el sentido que ambos son hijos de Dios. Adán no tuvo un padre natural como tampoco lo tuvo Cristo. Adán no tuvo una madre como tampoco la tuvo Cristo.

En el caso de Cristo podemos decir que él estuvo en “un vientre escogido”, pero su padre fue Dios. Como hijo de Dios Adán fue creado, Jesús como Hijo de Dios siempre estuvo con su Padre.

Él siempre ha sido la segunda persona de la Trinidad. Jesús no se hizo Hijo de Dios cuando se encarnó. Él nunca ha dejado esa posición. Pero ya en su encarnación, él al igual que Adán “estuvo sólo”. Si su encarnación era figura del primer Adán, él estuvo también solo, de allí que al encarnarse necesitaba de compañía.

c. Lo que Jesús necesitó para comenzar (Marcos 3:13-19).

Considere que Jesús llenó su soledad al encarnarse haciéndose de hombres que le acompañaron. Ciertamente el comienzo de su ministerio estuvo marcado por cuatro grandes eventos.

El primero fue sus cuarenta días de ayuno y oración, rodeados de la tentación por Satanás. Luego se sometió al bautismo bíblico, después anunció su ministerio a través de lo que dijo Isaías de él anticipadamente y finalmente Jesús hizo un recorrido en búsqueda de sus discípulos quienes comenzarían su iglesia, su “ayuda idónea”.

Tome nota que en esa iglesia habría hombres de distintas clases que sería la naturaleza de ella a través de todos los tiempos. Con doce hombres Jesús comenzó su ministerio.

Después que resucitó les dejó la insipiente tarea de la Gran Comisión de ir a todas partes y anunciar su evangelio a través de un trabajo más especifico según Hechos 1:8. Vea cómo esa iglesia pasó de 12 a 120, después llegó a 3120, después a 8120 y desde allí ya serían incontables los seguidores del “tal Jesús”. A la soledad de Adán, Dios la suplió con Eva y la de Jesús con la iglesia.

II. EL SUEÑO DE ADÁN TIPIFICA LA MUERTE DE CRISTO POR SU IGLESIA

a. “…sueño profundo sobre Adán..” (Génesis 2:21).

Si bien es cierto que Dios pudo formar a Eva tomando de Adán alguna de sus otras partes estando despierto, es muy significativo el sueño profundo que trajo sobre él. Esto nos muestra que Dios no solo es un Dios de orden sino que sigue siempre un plan perfecto en su llamada “revelación progresiva”.

El sueño que puso en el “primer Adán” fue una muerte temporal. Acordémonos que Jesús definirá más adelante la muerte como un sueño, por lo menos eso fue lo que él dijo cuando resucitó a su amigo Lázaro. ¿Dónde está, pues, la tipología del “sueño profundo sobre Adán” comparado con el “sueño de Cristo”?

La Biblia nos dice que un día, al verdadero Adán se le hizo dormir en la cruz por seis horas, desde las nueve de la mañana hasta las tres de la tarde (Marcos 15:25, 33). Esto, en efecto, es el significado de la frase de “Dios hizo caer sueño profundo sobre Adán”, y “tomó una de sus costillas” a fin de edificar una mujer para él (Génesis 2:21). Del “sueño de Adán” Dios trajo la una hermosa dama. Adán va a destacar esa belleza. Del “sueño” (muerte) de Cristo vino su Esposa.

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