Somos luz, brillemos

3. Como hacemos para mostrar esa luz?

Nuestras obras.

Vers. 16 “Así alumbre vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras buenas obras, y glorifiquen a vuestro Padre que está en los cielos“.

Por nuestras obras es que nosotros mostramos la luz que tenemos, la gente vera esa luz de Jesús a través de nuestras obras.

Ahora aclaro algo, eso no quiere decir que por las obras que hagamos seremos salvos, porque no es así, la salvación es por fe. Pero recordemos que las obras nuestras hablan de la fe que tenemos, Santiago dice muéstrame tu fe sin obras y yo te mostrare mi fe a través de mis obras.

La biblia dice en Efesios 2 que fuimos creados en Cristo Jesús para hacer buenas obras. Así qué parte de nuestra naturaleza es hacer buenas obras.

Obras dignas de una persona arrepentida.

Mateo 3:8 “haced pues, frutos dignos de arrepentimiento”.

NTV “demuestren con su forma de vivir que se han arrepentido de sus pecados y han vuelto a Dios“.

Obras que hablen de un Dios que cambia las vidas.

Obras que muestran que nuestro andar es en luz. Efesios 5:8, “en otro tiempo erais tinieblas, mas ahora sois luz en el Señor; andad como hijos de luz“.

TLA “no conocer a Dios es como vivir en la oscuridad, y antes ustedes vivían así, pues no lo conocían. Pero ahora ya lo conocen, y han pasado a la luz; vivan entonces como corresponde a quienes conocen a Dios“.

Vivir como corresponde a los que conocen a Dios.

Hechos 26:20 “sino que anuncie primeramente a los que están en damasco y Jerusalén y por toda la tierra de Judea, y a los gentiles, que se arrepintieran y se convirtiesen a Dios, haciendo obras dignas de arrepentimiento“.

Toda persona arrepentida debe respaldar con sus obras lo que esta diciendo con su boca, de concordar. Contésteme esta pregunta.  “Si usted fuera arrestado por ser un cristiano, ¿habría bastante evidencia para declararlo culpable”?

1 Pedro 2:12: “manteniendo buena vuestra manera de vivir entre los gentiles; para que en lo que murmuran de vosotros como de malhechores, glorifiquen a Dios en el día de la visitación, al considerar vuestras buenas obras.”

TLA “pórtense bien cuando estén con gente que no cree en Dios. Así, aunque ahora esa gente hable mal de ustedes, como si fueran unos malvados, luego vera el bien que ustedes hacen y alabara a Dios el día en que el les pida cuentas a todos“.

Necesitamos brillar

Necesitamos brillar de tal forma que cuando hablen de ustedes o de mi algo haya gente que escuche y no crea lo que se esta diciendo.

Ciertamente van hablar de nosotros, por mas cuidado que tengamos en hacer las cosas la gente va hablar. Las personas mal interpretan las palabras que decimos, mal interpretan situaciones, momentos, mal interpretan el lugar donde estemos, las personas con las que estemos, así hacían con Jesús, a él lo juzgaban por las personas con quienes compartía y lo mismo pasa ahora.

Vamos a ser señalados, juzgados pero si lo hacen sin razón pues somos bienaventurados, si lo hacen sin justa causa pues ellos serán los que después tendrán vergüenza. Tu sigue brillando.

• Por su manera santa de vivir.
• Por su amabilidad con las personas.
• Por su compasión con los necesitados.
• Por mi vocabulario.
• Por mi relación con los demás.
• Por mi forma de trabajar. Llego puntual
• Por mi forma de hacer negocios

No basta solo con hacer las cosas, no basta solo con obrar, es necesario hacerlo de la forma correcta, no es hacer por hacer, es hacerlo bien. Se puede hacer cosas buenas pero de mala gana, no es así como debemos hacer las cosas, debemos colocarle ese tinte especial de Dios a todo lo que hacemos.

4. Para que haya luz es necesario que haya combustión o energía que produzca esa luz.

Nosotros alumbramos con nuestra luz pero la energía o fuerza viene de Dios. Es necesario permanecer en el para tener la fuente de esa energía que necesitamos para alumbrar.

Éxodo 34: 29-35.

El rostro de Moisés alumbraba porque había estado en la misma presencia de Dios, en la medida que nosotros pasemos en su presencia nuestras vidas proyectaran esa luz radiante de su presencia.

En este tiempo tal vez su rostro no brille como el de Moisés, pero con las obras que usted hace puede hacer brillar esa luz, con sus actos puede mostrar a todos que en usted hay algo diferente. Algo especial.

Es imposible resplandecer si no estamos en Su presencia, si como Moisés no anhelamos más de él, no anhelamos sumergirnos es esa luz de su gloria.

© Luis Ortiz. Todos los derechos reservados.

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