El avivamiento personal
Nótese algo muy importante; el avivamiento llega cuando la iglesia está en un mismo sentir.
En Joel 2-28 encontramos que él profetizó de que el bautismo del Espíritu Santo iba a caer sobre toda carne, pero eso se logra amados con ayuno, oración y obediencia. La iglesia de hoy quiere todo exprés rápido y eso no es así; es necesario venir al altar y humillarse, y Él hará.
En Hechos 2-1 vemos claramente que la iglesia primitiva es el ejemplo de los grandes avivamiento, y la clave es la “unidad”, ya que ellos compartían todo en común por eso el Señor les dio muchas señales y prodigios.
Mi pregunta es: ¿pastor crees que en tu iglesia existe esa unidad que practicó la iglesia primitiva? Porque tu puedes clamar por unción de lo alto, pero si no hay unidad dentro de la congregación es difícil que el avivamiento llegue.
Conclusión:
Necesitamos un avivamiento personal. El avivamiento personal es lo que nos conduce a buscar más de Dios. Un avivamiento personal nos traerá todo lo que necesitamos y mucho más, tal como fue el caso en la Calle de Azusa.
¿Deseas que Dios envíe un avivamiento a tu vida? Entonces busquemos el perdón de Dios, unámonos en oración pidiéndole a Dios que tenga piedad de nosotros y nos de la fortaleza que necesitamos para perseverar en nuestra fe.
¿Deseas un avivamiento para tu comunidad? Entonces ora a Dios pidiendo que cree en ti un corazón limpio y que renueve tu espíritu.
Si algo hemos aprendido a través del tiempo es que la oración es la llave que abre las puertas del cielo. Tenemos que siempre orar para que Dios renueve nuestra mente y nuestro espíritu, porque para que exista un avivamiento en tu comunidad, primero tiene que existir un avivamiento personal.
Recordemos siempre que el avivamiento comienza en nuestro corazón. Recordemos que el avivamiento comienza en casa para que se refleje en la iglesia.
© Juan Antonio Ferrufino Palacios. Todos los derechos reservados.