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Tres actitudes

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Predicas Cristianas Predica de Hoy: Tres actitudes

Predica de Hoy Texto Bíblico: Génesis 18:1-3

Predica de Hoy – Tres actitudes – Introducción

Tres actitudes, tres reacciones distintas podemos extraer de este pasaje de las Escrituras, pero hoy podemos ver también actitudes similares cuando el Señor se aproxima a la vida de las personas para salvarles, bendecirles o hablarles de los propósitos que tiene con ellas, aún cuando les hable de grandes propósitos.

Para ampliar un poco el conocimiento y ver en el medio en que se movía Abraham, quiero decirles que el encinar se trataba de un lugar en donde estaban los árboles mas altos, era un lugar prominente en donde se efectuaban sacrificios a los dioses paganos; allí, en medio de la idolatría es donde Abraham había levantado un altar al Dios verdadero, el Señor siempre se levanta en guerra santa donde hay pecado para alcanzar con su salvación a toda criatura.

El Señor no se fija en lugares, donde es más dura la lucha con el demonio, en donde parece más difícil recibir algo, es donde se presenta Él para derramar bendición (Efesios 1:3). Cuando una sanidad imposible para la medicina, aparece el Señor derramando de su sanidad divina (Isaías 53:5). Allí donde parece mas difícil lograr un siervo, allí está el Señor para mostrar su gloria y fortalecer su obra (1 Corintios 1:27).

Rescatemos de la porción de la Escritura que leímos, tres actitudes distintas: 

1. La forma en que Abraham actuó frente a quienes llegaban y hasta el momento de separarse nuevamente de ellos; salió corriendo a recibirles, les sirvió y atendió, les escuchó y les acompañó.

2. La actuación de Sara ante semejante noticia, riéndose en medio de la duda.

3. La reacción de Sara cuando es exhortada por su forma de actuar, tratando de justificarse aún mintiendo.

Antes que nada debemos tener en claro que Dios mismo había descendido y se había personalizado en uno de esos varones, es decir que no eran cualquier persona.

Como cristianos deberíamos preguntarnos cuantas veces habremos albergado ángeles del Señor en nuestros hogares ya que cuando anhelamos la presencia del Señor, Él envía sus ángeles para cumplir nuestros deseos.

Comencemos nuestra reflexión en la segunda actitud, la de Sara frente a la noticia de que tendría un hijo a ésa edad. Sara se rió, se burló y dudó del mensaje de Dios, (verss. 12). Pecó doblemente al burlarse y dudar de Dios.

Cuantos personas hay que se burlan de los mensajes del Señor

Es evidente que sin la presencia del Señor en sus vidas, el ser humano no tiene capacidad para recibir los mensajes divinos; aún hay muchos cristianos que reciben preciosas palabras de parte de Dios y parecen burlarse de ella al echarlas al olvido, pareciera que no les interesa lo que el Señor quiere decirles.

Podríamos quizás comprender la actuación de la gente del mundo frente a un mensaje divino ya que solo los espirituales pueden discernir las cosas del Espíritu, pero de ninguna manera quién haya recibido a Jesús en el corazón como su Señor y Salvador puede hacer oídos sordos al mensaje divino.

Cuando el Señor nos habla

Como cristianos debemos saber que cuando el Señor nos habla es para darnos una orden y no para consultarnos sobre que deseamos hacer, si tu recibiste a Cristo y Él te habló en alguna ocasión respecto de un propósito que tiene con tu vida como lo hizo con Sara, debes poner toda tu atención en el mensaje para cumplir diligentemente con sus requerimientos, (Proverbios 13:4).

Como cristiano debes saber que el Señor no habla en vano y si Él dice algo es porque eso va a suceder, te guste o no te guste a ti. Debes entender que si eres un verdadero creyente no puedes hacer otra cosa que prepararte para lo que el Señor tiene contigo.

Mira, si volvemos a Sara y estuviéramos en la actualidad, a Sara no le cabía otra acción que salir a buscar el ajuar del niño y comenzar a comprar los pañales, pero en lugar de eso comenzó a cuestionar la palabra, a dudar de su cumplimiento.

Pero aún siendo cristianos hay quienes abren su mente al enemigo y lo primero que éste siembra en ella es la duda, en lugar de atesorar la palabra la minimiza en cualquier rincón de su mente y agranda en ella la duda. Debemos pensar que como cristianos tenemos la mente de Cristo y en la mente de Cristo no hay lugar para la duda, todo el lugar lo ocupa la fe.

Trabajar para llevar adelante el propósito de Dios

Si eres cristiano y recibiste una palabra de Dios, deja ya de dudar y ponte a trabajar para llevar adelante el propósito de Dios, déjame decirte que si no trabajas en pos de lo que el Señor te ha dicho.

Debes comenzar a analizar si en verdad tu mente la ocupa Cristo o esta llena de las dudas que el enemigo se encargó de sembrar en ella para que te quedes cómodamente sentado, pero en enemistad con Dios.

Si recibiste un mensaje de Dios, una promesa y hasta hoy no hiciste nada por ella, ten cuidado pues sus propósitos no se dejarán de cumplir, estás entrando en la segunda actitud y vendrá la exhortación (vers. 13).

Seguramente que el enemigo pondrá palabras de justificación en tu boca, no tengo tiempo, estoy cansado, trabajo mucho y con cuantos engaños más llena la mente de aquellos que no toman el mensaje, de aquellos que no han llenado aún su mente totalmente de las cosas de Dios y han dejado áreas de su vida en tinieblas.

Actitud de Abraham

Como verdaderos cristianos nos cabe una sola actitud, la de Abraham que ante la presencia de Dios salió corriendo a recibirle y rogarle (Génesis 18:3), él no quería que pasaran sin dejarle su bendición.

Abraham era un hombre rico, tenía todas las comodidades, pero dejó su comodidad para salir a recibirle. Para buscar a Dios es necesario que dejemos nuestras comodidades y salgamos a su encuentro, es necesario que dejemos todo para seguirle, (Marcos 1:17-18).

Abraham no se quedó con estar junto a Dios, él de inmediato comenzó a servirles y ordenó que toda su familia le atendiera y sirviera. Pensemos cada uno si actuamos como Abraham, pensemos si en verdad sentimos gozo por la presencia del Señor, si en verdad estamos dispuestos a servirle y darle todo lo necesario para que Él este bien.

Abraham fue mas allá aún, ordenó a su familia que les sirvieran pues cuando Dios viene a nuestras vidas no es para que estemos solos con Él sino que nuestra familia también debe ponerse a su disposición, el Señor busca familias completas para que trabajen en su obra pues la obra de Dios no es de unos pocos sino de todos.

Vemos en el versículo 16 que los varones se iban pero Abraham les acompañaba, él no quería salir de su presencia. Esta es la actitud, es el deseo que debemos mantener en nuestras vidas, debemos anhelar estar permanentemente en la presencia del Señor, Su presencia debe ser nuestra compañía permanente.

Observemos otra cosa importante, Abraham acompañaba a los varones de Dios, quería seguir en su presencia pero no solo por el hecho de estar junto a ellos sino que él seguía intercediendo. Como cristianos no debe bastarnos el estar en la presencia del Señor sino que también debemos trabajar en forma permanente para su obra.

CONCLUSIÓN

Abraham es considerado el padre de la fe, (Romanos 4:16-17). Es hallado amigo de Dios, (Isaías 41:8). Abraham es un ejemplo que cada cristiano deberíamos seguir. Abraham fue e hizo como cada cristiano deberíamos ser y hacer.

Cada uno de nosotros deberíamos reaccionar como Abraham ante la presencia y el llamado del Señor, “Heme aquí” (Isaías 6:8) deberían ser siempre nuestras palabras cuando el Señor nos llama al servicio activo en la iglesia y desde ese momento deberíamos comenzar a trabajar para Él activamente.

Estos son los verdaderos cristianos, los que han aprendido a confiar en el Señor, poniendo sus vidas en la guía que Él les entrega a fin de cumplir con sus propósitos.

Están los otros, los muchos que dudan de la palabra que Dios les habló, dudan si será posible que se concrete lo que el Señor les está diciendo; y como dudan, no trabajan ni hacen nada para el Señor, retrasan o pierden las bendiciones o ministerios por darle lugar a la duda que el enemigo coloca en sus mente y no se dan cuenta que con su actitud están siendo desobedientes y rebeldes a la orden de Dios.

Por último, tenemos a aquellos que están indecisos, no saben si trabajar o no. La indecisión es producto también de la duda. Pero aún así el Señor les está mirando y les llama, les llega a exhortar muchas veces para luego hacer ese llamado cada vez mas fuerte de manera que reaccionen y cumplan los propósitos que el Señor tenga con cada uno de ellos.

Cada uno de nosotros deberíamos evaluar en qué grupo estamos incluidos; ¡¡Gloria a Dios por los que están en primer grupo!! Estarán trabajando y haciendo la voluntad del Señor, mantienen una buena vida espiritual y crecen día a día en sus ministerios y bendiciones.

Ahora, si estás incluido en los otros dos grupos debes saber que eres rebelde y desobediente al mandato del Señor y que ésta situación te hace perder bendiciones o el proyectarte en las cosas de Dios, también debes saber que las exhortación de Dios será cada vez mas dura para que cumplas el propósito, (Génesis 28:15).

© Ricardo Hernández. Todos los derechos reservados.

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2 comentarios en «Tres actitudes»

  1. Hermosa predica como siempre hermano usted tiene un don es un elegido de Dios para predicar pues sus predicas enciendo el fuego en nuestro corazón

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