UN ZAPATO ESPECIAL

Franklin Riera

Un zapato especial

UN ZAPATO ESPECIAL

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Predicas Cristianas | Un zapato especial

Predicas Cristianas Lectura Bíblica Principal:…y calzados con la disposición de proclamar el evangelio de la paz.Efesios 6:15

Introducción

¿Están listos para descubrir la importancia y la belleza de calzar nuestros pies con el evangelio de la paz? Prepárense para deslizarse en un par de zapatos celestiales que no solo protegen, sino que fortalecen y guían nuestros pasos en la senda de la fe.

¡Bienvenidos a todos a esta prédica sobre el “zapato especial” basado en Efesios 6:15! Hoy veamos a través de la analogía de un calzado divino que nos equipa para la batalla espiritual diaria.

Una de las cosas que más nos preocupamos a veces al vestirnos es nuestros zapatos, que estén muy limpios, que convienen, protejan, sean cómodos, y sobre todo útiles para el uso o actividad del día.

Estoy orgulloso de mis zapatos, que están brillantes y limpios, aunque no sean nuevos, porque hoy vamos a hablar de zapatos. No de mis zapatos, ni de los suyos, sino de un par único que he bautizado como “un zapato especial y celestial “. Dice, “y calzaos los pies con el apresto del evangelio de la paz”.

Vamos a analizar algunas palabras clave:

“ὑποδησάμενοι” (hypodesamenoi): Este término griego hace referencia a “calzar” o “ponerse los zapatos”. Es importante notar que este verbo se encuentra en tiempo aoristo, lo que indica una acción puntual y completa de calzarse con el “apresto” o la “preparación” del evangelio de la paz.

“πόδας” (podas): Esta palabra griega significa “pies”, señalando la parte del cuerpo que es calzada con dicho zapato especial. En la cultura de la época, el calzado no solo protegía los pies, sino que también simbolizaba la preparación y la disposición para la acción.

“ἑτοιμασίᾳ” (hetoimasía): Aquí se traduce como “preparación” o “apresto”, destacando la importancia de estar listo y equipado con el mensaje del evangelio de la paz. Este sustantivo enfatiza la necesidad de estar equipado espiritualmente para enfrentar las batallas espirituales que se presentan en la vida cotidiana.

“εὐαγγελίου τῆς εἰρήνης” (euaggeliou tēs eirēnēs): Esta expresión representa “el evangelio de la paz”, resaltando la naturaleza transformadora y reconciliadora del mensaje de Cristo que brinda paz, tanto con Dios como en nuestras relaciones interpersonales.

Estas palabras nos revelan la importancia de calzar nuestros pies con la preparación del evangelio de la paz, no solo como un acto físico, sino como un símbolo de nuestra disposición espiritual para enfrentar las luchas espirituales con valentía y firmeza.

I. ES UN ZAPATO CON CARACTERÍSTICAS DIVINAS.

Estas características especiales, son de tal naturaleza, debido al origen de este calzado. Este zapato no es Pelileo, de Ipiales, de Cotacachi, o de algún lugar famoso, sino que proviene directamente del cielo.

Su creador y diseñador es divino, este calzado, mencionado en Efesios 6:15, es verdaderamente único y especial en su origen y composición. Al ser un calzado que proviene directamente del cielo, su diseño y fabricación son de índole divina, distinguiéndolo de cualquier producto terrenal. Este calzado no es obra de un artesano humano, sino que su creador es el mismo Dios, cuya mente infinita lo ha concebido de manera perfecta para impactar nuestras vidas de manera significativa. Su composición, descrita como “el apresto del evangelio de la paz”, revela que este calzado no está hecho de materiales terrenales comunes, sino de las preciosas y transformadoras buenas nuevas que solo pueden ser encontradas en la Palabra de Dios.

¿De qué material está hecho?, No están hechos de piel de vaca, ni de la piel de algún animal exótico, sino de materiales tan valiosos que, sin revelación divina, son humanamente imposibles de conocer. Estos materiales para su fabricación se describen como “el apresto del evangelio de la paz”.

¿Has escuchado con atención? Estas son las buenas nuevas, es decir, noticias preciosas y positivas para las personas que las necesitan; y que, de hecho, son noticias que representan su bienestar espiritual para la eternidad. Este material no se puede obtener en ninguna tienda, ni siquiera en las tiendas más grandes del mundo, sino en la Palabra de Dios.

Este material consiste no sólo en buenas noticias, sino en efectos extremadamente positivos para todo ser humano, pues proporciona «paz». Sí, paz ante Dios principalmente. Paz con Dios por todos los errores y pecados cometidos en el pasado, paz con Dios por los errores que cometemos hoy, y paz con Dios por los errores que cometeremos mañana.

¿Qué zapatos en el mundo, le pueden dar tanto confort, tanto descanso y tanta dicha, sobre todo, para con Dios? ¿Qué par de zapatos en este mundo son fabricados con tan sublimes materiales? Ninguno. Entonces, ahora puede entender por qué estoy hablando de un Zapato muy especial.

Al tratarse de un “calzado celestial”, estoy afirmando que es de tan excelente calidad, que por tan viejo que sea, nunca se gasta. Y además, podemos llevarlo durante toda la vida y por todos los lugares.

En Efesios 6:15, somos exhortados a calzar este apresto del evangelio de la paz, lo que simboliza más que simples zapatos físicos, sino parte de la armadura espiritual provista por Dios para nuestra protección y avance en la fe. Este zapato especial no solo nos brinda la paz con Dios, sino que también nos otorga consuelo, descanso y dicha en nuestra jornada espiritual. Es un recordatorio constante de la gracia, el perdón y la paz que Dios nos ofrece a través de Su Palabra y Su obra redentora en nuestras vidas. Como un regalo celestial de inigualable valor, este calzado nos acompaña de por vida, sin desgastarse jamás, y nos capacita para enfrentar cualquier desafío con fortaleza y confianza en Dios.

II. UN ZAPATO TAN CELESTIAL, ES DIGNO DE SER PROBADO POR TODOS.

Todos pueden experimentar el placer de llevarlo, pues se ajusta perfectamente a todas las vidas. No importa que usted sea deportista, o licenciado, o doctor, o reciclador, etc, pues es del todo cierto que todo hombre, en todo lugar, necesita del perdón de Dios y la paz que éste puede darle.

Este calzado celestial, como se menciona en Efesios 6:15, no está reservado para unos pocos privilegiados, sino que está disponible para todos aquellos que deseen experimentar su poder transformador en sus vidas. Su adaptabilidad y universalidad lo hacen accesible a personas de todas las condiciones y estilos de vida. Ya sea un atleta, un académico, un profesional de la salud o alguien en extrema necesidad, todos necesitan el perdón y la paz que solo Dios puede otorgar.

El testimonio de aquellos que han calzado este calzado celestial es elocuente: su confort es incomparable, su durabilidad asombrosa y su protección incomparable. Al llevar este calzado, podemos avanzar con confianza y seguridad, sabiendo que estamos protegidos de los peligros y desafíos que enfrentamos en nuestra jornada terrenal. Es un recordatorio constante de la firmeza y seguridad que encontramos en la gracia y la paz de Dios.

En Efesios 6:15, se nos insta a calzar nuestros pies con el apresto del evangelio de la paz. Este llamado NO hace distinción de estatus social, educativo o económico, sino que se dirige a toda la humanidad que anhela el perdón y la paz que solo Dios puede brindar. Al probar este calzado celestial, descubrimos que su ajuste perfecto y su capacidad para protegernos de los obstáculos de la vida son verdades tangibles y eternas.

Al compartir nuestro testimonio personal sobre los beneficios y la seguridad que experimentamos al llevar este calzado celestial, inspiramos a otros a también probarlo y experimentar la paz y la seguridad que provienen de una relación íntima con Dios. Es un llamado universal a todos los corazones sedientos de perdón y consuelo a encontrar en Dios la respuesta a sus anhelos más profundos.

Los que ya hemos probado este calzado, podemos dar testimonio de que no cansa, y que, de hecho, podemos pisar confiadamente sin sufrir daño mortal por las rocas y tropiezos que hay en la vida.

III. UN ZAPATO TAN ESPECIAL, IMPLICA LA NECESIDAD DE MUCHOS.

Implica la necesidad que tienen los pecadores, que van descalzos por la vida y que, teniendo el deseo de llegar hasta la ciudad celestial, no podrán, pues, descalzos es imposible llegar a ella.

Otros muchos, aunque no están descalzos, no se percatan que llevan “Zapato pirata”, que, aunque parece genuino, no lo es. Sus sandalias, son sandalias religiosas, llenas de ritos e ideas contrarias a la Palabra de Dios.

Sus zapatos contienen materiales filosóficos y mundanos que niegan la voluntad de Dios y sus promesas. ¿Cómo llegaran con calzado de tan mala calidad? ¡Imposible!

Estimado amigo que me mira o escucha, usted que no es cristiano, ¿por qué seguir descalzo? Venga a Cristo y obedezca el evangelio. No importa cuán sucios estén sus pies, el Señor aún está dispuesto a lavarlos, dándole el perdón que usted tanto necesita.

Cuando el “hijo pródigo” se fue de casa, salió con sandalias propias de un príncipe. Sin embargo, y una vez que derrochó la fortuna que su padre le había heredado, el pobre no tenía ni para comparar los zapatos más baratos que existiesen. Es así que, estando en esta condición tan miserable, volvió en sí y regresó a casa de su padre para pedir su perdón.

Y cuando el padre le recibió, dijo a sus siervos, “Sacad el mejor vestido, y vestidle; y poned un anillo en su mano, y calzado en sus pies” (Lucas 15:22). Usted no tiene por qué andar descalzo. Vuélvase a Dios, y él será amplio en perdonar.

Algunos hermanos, lamentablemente también están descalzos. Pero no porque el calzado haya salido defectuoso, sino por un tumor maligno que ha brotado en sus pies, y que hace imposible la adaptación de este calzado celestial. El arrepentimiento es lo único que puede sanar ese pie herido, y así este calzado celestial pueda ser llevado por usted.

El zapato especial, basado en Efesios 6:15, no solo es esencial para quienes van descalzos en busca de la Ciudad Celestial, sino también para aquellos que llevan un calzado falsificado, lleno de tradiciones humanas y doctrinas ajenas a la Palabra de Dios. Muchos se encuentran caminando con sandalias religiosas, carentes de la verdadera paz y protección que solo el evangelio auténtico puede brindar. Estos calzados terrenales, hechos de materiales mundanos y filosóficos, no pueden guiar a las personas hacia la verdadera vida que Dios ofrece.

El llamado a la reflexión se extiende a todos, tanto a los no creyentes que van descalzos por la vida, como a los creyentes que portan un calzado inapropiado o están heridos por el pecado. La historia del hijo pródigo nos recuerda que, incluso en nuestra miseria y arrepentimiento, Dios está dispuesto a recibirnos, perdonarnos y equiparnos con el mejor calzado celestial para continuar nuestro camino hacia Él.

En Lucas 15:22, al recibir al hijo pródigo de regreso a casa, el padre ordena a sus siervos: “Sacad el mejor vestido, y vestidle; y poned un anillo en su mano, y calzado en sus pies”. Esta imagen poderosa ilustra la disposición de Dios de restaurar a aquellos que se arrepienten y regresan a Él. Así como el padre vistió y calzó a su hijo, Dios está listo para vestirnos con Su gracia y amor, dándonos el perdón y la restauración que tanto necesitamos.

El llamado es claro, el arrepentimiento es el camino para sanar nuestras heridas y permitir que el calzado celestial se ajuste a nuestras vidas. Aquellos que están heridos por el pecado pueden encontrar sanidad y restauración en la gracia y el perdón de Dios, permitiéndoles caminar en victoria y fe hacia su presencia.

Que estas reflexiones despierten el deseo de arrepentimiento y fe, los guíen hacia el regazo amoroso del Padre celestial. ¡Que este mensaje de esperanza y restauración resuene en los corazones de todos los presentes!

Conclusión

¿Está usted descalzo? No hay razón para usted continúe así. Usted tiene la oportunidad ahora mismo, de obedecer el evangelio de Cristo, y recibir la verdadera paz que él puede darle. Falta que usted venga y le obedezca.

Si usted es un creyente que ha lastimado sus pies por andar descalzo, dejando el evangelio de lado, yendo por veredas engañosas de pecado y perdición, hoy es el día para que, por el arrepentimiento, usted sabe sus pies y lleve este calzado celestial, para poder hacer frente a toda aflicción que pudiera presentarse en contra de su fe.

© Franklin Riera. Todos los derechos reservados.

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Franklin Riera
Autor

Franklin Riera

Lic. en Teología Pastoral y Estudios Transculturales, Maestría en Estudios Bíblicos y Teología. Pastor de la Iglesia del Pacto Evangélico del Ecuador por casi 20 años..

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