Un encuentro personal

Luis Alberto Coria

Un Encuentro Personal

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Un encuentro personal | Predicas Cristianas

Tema: Cómo Un Encuentro Personal con Jesús Puede Transformar Tu Vida Para Siempre

Introducción

Un encuentro personal con Jesús es la experiencia que cambia por completo la vida del ser humano. No basta con conocer de Dios o recibir una simple visitación; es necesario tener un encuentro sobrenatural donde Su presencia transforme cada área de nuestro ser. Este encuentro abre las puertas a una conversión espiritual genuina, permitiendo que Jesús tome el control y guíe nuestras decisiones hacia la voluntad de Dios.

Leamos la Palabra de Dios en Hechos 9:1-9:

“Saulo, respirando aún amenazas y muerte contra los discípulos del Señor, vino al sumo sacerdote… Mas yendo por el camino, aconteció que al llegar cerca de Damasco, repentinamente le rodeó un resplandor de luz del cielo; y cayendo a tierra, oyó una voz que le decía: Saulo, Saulo, ¿por qué me persigues?… Él, temblando y temeroso, dijo: Señor, ¿qué quieres que yo haga?”

Este pasaje nos muestra cómo el encuentro de Saulo con Jesús no solo cambió su nombre a Pablo, sino que transformó radicalmente su propósito y destino. Este encuentro es un modelo perfecto de la conversión espiritual que todo creyente necesita experimentar.

I. La Necesidad de Un Encuentro Sobrenatural

Es un error pensar que asistir a la iglesia o realizar actividades religiosas garantiza una verdadera transformación. Muchos creyentes cumplen con algunos mandamientos, pero si no han experimentado un encuentro personal con Jesús, sus vidas no reflejarán el fruto de una conversión espiritual genuina.

Jesús declaró en Mateo 22:37:

“Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente”.

Este mandamiento es la base de la vida cristiana. Sin embargo, si Dios no ocupa el primer lugar en nuestro corazón, corremos el riesgo de vivir una fe superficial y rutinaria.

Consideremos el ejemplo de Adán. Él tenía comunión diaria con Dios en el Edén, pero su relación se volvió tan cotidiana que desobedeció una orden directa, perdiendo así la vida eterna y su lugar en la presencia de Dios (Génesis 3:1-24). Esta historia nos enseña que no basta con recibir las bendiciones de Dios; necesitamos un encuentro sobrenatural que transforme nuestra vida y nos impulse a obedecer Su voluntad.

Asimismo, muchos creyentes han recibido bendiciones y manifestaciones del poder de Dios, pero sus decisiones diarias no reflejan una vida rendida a Cristo. Es posible haber tenido encuentros con Dios y, aun así, seguir viviendo según la carne. La diferencia radica en que un encuentro sobrenatural no solo impacta nuestras emociones, sino que cambia nuestra forma de pensar, actuar y vivir.

En el caso de Saulo, el encuentro con Jesús fue tan impactante que lo hizo temblar de temor reverente:

“Él, temblando y temeroso, dijo: Señor, ¿qué quieres que yo haga?” (Hechos 9:6).

Este temor reverente es esencial para una conversión espiritual genuina. Cuando reconocemos a Jesús como nuestro Señor y Salvador, permitimos que Él tome el control de nuestras decisiones y transforme cada área de nuestra vida.

II. La Conversión Espiritual: De Perseguidor a Seguidor

Saulo no solo escuchó la voz de Jesús, sino que reconoció Su autoridad y respondió con obediencia. Este acto de rendición marcó el inicio de su transformación. La pregunta que hizo Saulo revela la esencia de la conversión espiritual:

“Señor, ¿qué quieres que yo haga?” (Hechos 9:6).

Cuando alguien tiene un encuentro personal con Jesús, su vida deja de girar en torno a sus propios deseos y comienza a buscar la voluntad de Dios. La verdadera conversión espiritual implica un cambio de dirección, dejando atrás el pecado y viviendo para glorificar a Dios.

El apóstol Pablo expresó esta transformación en Gálatas 2:20:

“Con Cristo estoy juntamente crucificado, y ya no vivo yo, mas vive Cristo en mí”.

Este versículo resume la esencia de la vida cristiana: morir al yo y permitir que Cristo viva en nosotros. La conversión espiritual no es solo un cambio de conducta, sino una transformación profunda que afecta nuestros pensamientos, emociones y acciones.

La diferencia entre una fe superficial y una fe transformadora radica en la actitud del corazón. Mientras algunos creyentes se conforman con recibir bendiciones, aquellos que han tenido un encuentro sobrenatural buscan servir a Dios con todo su ser. Este cambio de perspectiva nos lleva a vivir una vida de obediencia, amor y servicio.

En el caso de Pablo, su conversión espiritual lo llevó a dejar atrás su vida pasada y dedicarse por completo a predicar el evangelio. Aquél que perseguía a los cristianos se convirtió en uno de los apóstoles más influyentes de la historia, demostrando que nadie está fuera del alcance de la gracia de Dios.

III. El Impacto de Un Encuentro Personal con Jesús

Un verdadero encuentro personal con Jesús produce frutos visibles en la vida del creyente. Al igual que Saulo fue transformado en Pablo, cada persona que experimenta una conversión espiritual comienza a reflejar el carácter de Cristo en su diario vivir.

Jesús nos llama a vivir una vida de obediencia y servicio. No basta con conocer la Palabra; es necesario ponerla en práctica. La Biblia dice en Santiago 1:22:

“Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solamente oidores, engañándoos a vosotros mismos”.

Cuando permitimos que Jesús transforme nuestro corazón, nuestras prioridades cambian. Ya no vivimos para nosotros mismos, sino para cumplir el propósito que Dios tiene para nuestra vida. Este compromiso se refleja en nuestras relaciones, decisiones y acciones diarias.

Además, un encuentro sobrenatural con Jesús nos capacita para enfrentar las pruebas con fe y esperanza. Pablo, quien sufrió persecuciones, cárceles y dificultades, pudo decir en Filipenses 1:21:

“Porque para mí el vivir es Cristo, y el morir es ganancia”.

Este nivel de fe solo es posible cuando hemos experimentado el poder transformador de Jesús. La conversión espiritual nos da una nueva perspectiva de la vida y nos llena de gozo, paz y propósito, aun en medio de las adversidades.

Cuando alguien tiene un encuentro personal con Jesús, su testimonio se convierte en una herramienta poderosa para impactar a otros. La transformación que Dios obra en nuestra vida es visible para quienes nos rodean, y esto abre puertas para compartir el evangelio. Así como el cambio de Pablo impactó a miles de personas, nuestra vida también puede ser un instrumento en las manos de Dios para llevar luz a quienes están en tinieblas.

Conclusión

El ejemplo de Saulo nos enseña que un encuentro personal con Jesús tiene el poder de transformar incluso al corazón más endurecido. No importa cuál haya sido tu pasado o cuántos errores hayas cometido; cuando te encuentras con Jesús, todo cambia.

El Señor no quiere que vivas una fe superficial. Él desea que tengas un encuentro sobrenatural que marque tu vida para siempre. Este encuentro no solo te libera del pecado, sino que te capacita para vivir conforme a Su voluntad y cumplir el propósito para el cual fuiste creado.

Hoy, Jesús está tocando la puerta de tu corazón. Él quiere entrar y transformar tu vida desde lo más profundo. No te conformes con una relación superficial; busca ese encuentro personal con Jesús que traerá una conversión espiritual genuina y te permitirá experimentar Su amor, poder y propósito.

“He aquí, yo estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré a él, y cenaré con él, y él conmigo” (Apocalipsis 3:20).

¡No esperes más! Hoy es el día de tu encuentro sobrenatural con Jesús. Abre tu corazón y permite que Su presencia transforme tu vida para siempre.

© Luis Alberto Coria. Todos los derechos reservados.

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Luis Alberto Coria
Autor

Luis Alberto Coria

Pastor jubilado de la iglesia Nueva Jerusalén en provincia de Córdoba República Argentina.

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