El principio del diezmo

a. Deuteronomio 12:5-6sino que buscaréis el lugar que Jehová vuestro Dios haya escogido de todas vuestras tribus para poner allí su nombre y morar en él, y allá iréis. 6 Allá llevaréis vuestros holocaustos, vuestros sacrificios, vuestros diezmos, la ofrenda alzada de vuestras manos, vuestras ofrendas votivas, vuestras ofrendas voluntarias y los primerizos de vuestras vacas y de vuestras ovejas.

b. Deuteronomio 12:13-14Ten cuidado de no ofrecer tus holocaustos en cualquier lugar que veas. 14 Más bien, sólo en el lugar que Jehová haya escogido en una de tus tribus, allí ofrecerás tus holocaustos, y allí harás todo lo que yo te mando.

Conclusión (Malaquías 3:8-12)

 La maldición es un poder espiritual que tiene el poder y la capacidad de dañar a una familia, una ciudad, una nación. Tiene el poder de dañar y de afectarla negativamente. En todas las aéreas. Las aéreas mentales, físicas, y materiales. Pero ese poder de maldición entra por el pecado. Y sabemos que la desobediencia es pecado.

Dios quiere que todos lleguemos al conocimiento de la VERDAD, esto es, al conocimiento de Su Hijo Jesucristo. Aún hoy, hay multitudes de cristianos que no conocen la VERDAD. Hay mucha manipulación satánica en el liderazgo, y cada vez es mayor la influencia de la MENTIRA en las iglesias (2 Timoteo 3:15).

Hay iglesias que enseñan mucho, que se dedican a cursos, talleres, seminarios, congresos, etc. Pero están llenos de falsas doctrinas, o enseñando cosas que no aprovechan para el Reino de los Cielos ni para la Salvación. Más allá de toda doctrina y curso, tenemos que estudiar diligentemente LA SANTA BIBLIA (Efesios 4:13-15). 

Conocer la VERDAD Y SER COMO JESUCRISTO. Esta es la meta que debemos plantearnos. Este es el propósito que debemos proseguir cada día hasta alcanzarlo. Cada día un poquito más: avanzando, adelantando, creciendo siempre en los asuntos de Dios. Nada de argumentos, nada de MENTIRAS. Sólo la VERDAD y nada más que la VERDAD.

Juan 14:6: “Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la VERDAD, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí.

¿QUÉ QUIERES MALDICIÓN O BENDICIÓN HASTA QUE SOBREABUNDE?

TU DECIDES

Saludos desde Puerto Cabello – Venezuela

© Miguel Lopez. Todos los derechos reservados.

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Descargo de responsabilidad: Los puntos de vista y opiniones expresados en este sermón sobre los diezmos son del autor y no reflejan la política oficial o la posición de Central de sermones en cuanto a los diezmos. Pregúntese: ¿Son los diezmos obligatorios? ¿Quien diezmo en el Nuevo Testamento?

Lea: Estudio Bíblico Exhaustivo acerca de los diezmos

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