Predicas Cristianas
Tema: La abundancia está en aguas profundas
Predicas Cristianas… Lectura Bíblica: Lucas 5:1-7
Introducción
El pueblo de Dios ha estado esclavizado en Egipto como lo estuvo durante 430 años el pueblo de Israel, pero Dios escucho el clamor de su pueblo y juró sacarlos de la esclavitud a la libertad.
Y no solo eso sino que Dios le ha prometido a Su pueblo que lo introduciría en una tierra especial, “Porque Jehová tu Dios te introduce en la buena tierra, tierra de arroyos, de aguas, de fuentes y de manantiales, que brotan en vegas y montes; tierra de trigo y cebada, de vides, higueras y granados; tierra de olivos, de aceite y de miel; tierra en la cual no comerás el pan con escasez, ni te faltará nada en ella; tierra cuyas piedras son hierro, y de cuyos montes sacarás cobre. Y comerás y te saciarás, y bendecirás a Jehová tu Dios por la buena tierra que te habrá dado” Deuteronomio 8:7-10.
Dios de manera sobrenatural liberó a su pueblo Israel, cada uno de nosotros, como parte del pueblo de Dios podemos disfrutar hoy de lo sobrenatural de Dios.
Fíjense que en el desierto recibían el maná para satisfacer su alimentación. Pero recordemos que este maná no podía ser guardado de un día para otro porque se dañaba. Esto nos enseña la dependencia de Dios. Además, recordemos que el pueblo estuvo parado a las puertas de la tierra prometida pero por su incredulidad no pudieron entrar a ella.
El pueblo llegó al Jordán
El pueblo llegó al Jordán y el Señor volvió a moverse en lo sobrenatural, de manera que el pueblo de Dios pasó en seco. Y algo natural que debían hacer era circuncidarse antes de entrar a esa tierra me pregunto, ¿cuántos han pasado el Jordán y han vivido lo sobrenatural de Dios? ¿Cuántos han circuncidado su corazón para entregarlo al Señor?
Los rebeldes murieron en el desierto y no pudieron disfrutar de la sobreabundancia para conformarse con el abastecimiento diario. Pues en el desierto mueren los murmuradores, las rebeldías, la fornicación, y la idolatría.
Lamentablemente muchos cristianos están pasando por el desierto, porque es necesario que allí mueran las obras de la carne “que son: adulterio, fornicación, inmundicia, lascivia, idolatría, hechicerías, enemistades, pleitos, celos, iras, contiendas, disensiones, herejías, envidias, homicidios, borracheras, orgías, y cosas semejantes a estas” Gálatas 5:19-21.
Gran parte del pueblo de Dios todavía está pensando que Dios suple nuestras necesidades, y eso es verdad. Lo hizo en el desierto donde no tuvo necesidad de nada, pero hay una promesa de sobreabundancia para aquellos que lleguen a Canaán y se dejen circuncidar. Dios está llamándonos a pasar del maná a la sobreabundancia.
