¿Qué significa la fe cristiana?

Bosquejos Biblicos

Bosquejos Bíblicos Predica de Hoy: ¿Qué significa la fe cristiana?

Bosquejo Bíblico Texto Bíblico: Génesis 17:7-8

INTRODUCCIÓN

Para comprender la fe cristiana debemos remontarnos hasta la figura de Abraham, que es presentado en la Biblia como el padre de todos los creyentes, judíos y no judíos (Romanos 4:11-12), esto quiere decir que Abraham es el modelo de la fe.

En la tradición judía, el padre era el modelo de fe para la familia (Génesis 28:13). El tema de la promesa que Dios hiso a Abraham, tiene importancia para el cristianismo, pues es Dios quien se manifiesta y comunica en los acontecimientos históricos. El fundamento para el cristiano es la esperanza, no como una casualidad sino como el cumplimiento de la promesa (Gálatas 3:14-16). Veamos el significado de la promesa.

I. ABRAHAM OBEDECE, CREE Y ESPERA

A. Obedece a la orden de Dios (Génesis 12:1)

1. Abraham vivió hacia el año 2000 anTesalonicenses de Cristo, nació en Ur, una importante ciudad al sur de Babilonia entre los ríos Tigris y el Éufrates. Abraham es de cultura urbana; pero un día deja la comodidad de su ciudad y la de su familia, para convertirse en nómada, vive en tiendas, cría ovejas y cabras, y cava posos, es la vida de los nómadas, no tiene casa ni ciudad porque siempre están en camino

2. Dios comienza a revelársenos y utiliza a gente que no está aferrada a su comodidad, es aquí donde podemos entender el significado de la fe. Abraham no pone objeción a Dios, deja sus relaciones de familia y se pone en camino, sin saber a dónde Dios lo está conduciendo “a la tierra que te mostraré”

B. Cree a la Palabra de Dios (Génesis 12:2)

1. Dios le promete una dependencia numerosa y grande; pero pasan los años y Abraham sigue igual; pero Dios sigue insistiendo (Génesis 15:5), y Abraham cree y espera en Dios (Génesis 15:6)

2. El tiempo sigue y Abraham y su mujer llegan a la ancianidad sin ver cumplida la promesa de Dios (Génesis 17:17; Génesis 18:11-12)

C. Abraham espera en Dios (Romanos 4:18-21)

1. Dios es fiel a su Palabra, el hijo de la promesa vino; pero viene el momento desconcertante a incomprensible para Abraham, Dios le pide que ofrezca en sacrificio al hijo de la promesa (Génesis 22:2), Abraham vuelve a creer a la Palabra de Dios (Génesis 22:3). Abraham es el hombre que no duda de la Palabra de Dios, aun cuando parezca que Dios se ha ocultado, espero en lo humanamente imposible, en lo que no tenía sentido, espero solamente porque Dios le había dado su Palabra

II. EL COMPROMISO DE DIOS CON ABRAHAM

A. una promesa ilimitada

Es el compromiso de Dios con Abraham y su dependencia, que promete acompañarlo, protegerlo y defenderlo hasta el final, es una promesa ilimitada. ¿Qué exige esa promesa como contrapartida?

1. “Seré tu Dios y el de tu descendencia” (Génesis 17:7), un Dios de nómadas que no está vinculado a un lugar estable, ni a un santuario, es un Dios que avanza y nos lleva a lo desconocido. Así son los caminos de Dios y el itinerario de la fe, Pero exige obediencia y fidelidad. El Dios que se revela no es el Dios amenazante que castiga y al que hay que suavizar con sacrificios y ofrendas

2. Abraham experimento pruebas terribles, pero siguió creyendo y esperando en Dios. El proyecto de salvación de Dios nos trae no depende de capacidades humanas

3. “Yo soy tu escudo” (Génesis 15:1). Para mucha gente Dios es una amenaza, que castiga, censura, enjuicia. A quienes les han enseñado así tienen la idea de un Dios implacable que castiga a los malos y a los buenos cuando estos se descuidan. Este Dios no existe, el Dios que se nos ha revelado es un Dios protector, que acompaña y garante del futuro, es un Dios que ofrece siempre ayuda, que es escudo y no abandona nunca, siempre proporciona seguridad y esperanza

4. “Yo estoy contigo” (Génesis 28:15). En la figura de Abrahán se nos muestra la fe en toda su hondura y en toda su grandeza. La fe es entrega y confianza inquebrantable en la palabra de Dios. Seguridad en Dios. Obediencia a sus designios, pase lo que pase, venga lo que venga. En eso consiste la actitud fundamental del hombre ante Dios. Y esa actitud hace visible a Jesús en el mundo.

Conclusión:

La fe cristiana afirma que el creyente no está condenado al fracaso y a la frustración. Por el contrario, la vida presente no es más que un trámite, que desemboca en la vida verdadera, en la plenitud de la vida.

En el Nuevo Testamento, la nueva vida que Cristo nos ha aportado no se agota en el tiempo histórico, sino que tiende a la superación o victoria del último enemigo, la muerte, y con ello a la vida eterna (1ª Corintios 15:26-28; Romanos 6:22; Gálatas 6:8). Pablo se representa el paso de la vida temporal a la eterna como un drama universal cósmico y como una transformación o apoteosis maravillosa (1ª Tesalonicenses 4,13-17; 1ª Corintios 15:20ss.35ss.51ss).

Para indicar lo que será la vida futura, Pablo se expresa por medio de alusiones metafóricas: será una vida corporal (1ª Corintios 15:35ss; 2ª Corintios 5:lss), ya que la vida sin cuerpo es inconcebible para el pensamiento judío; será además una contemplación cara a cara (1ª Corintios 13:12; cf 2ª Corintios 5:7); será también un compartir su gloria (Romanos 8:17); pero sobre todo será un estar con Cristo (1ª Tesalonicenses 4:17; 2ª Corintios 5:8; Filipenses 1:23)

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