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Liderazgo y el revello

Bosquejos Bíblicos

Predica de Hoy: Liderazgo y el revello

Bosquejos para Predicar Texto Bíblico Principal: Mateo 28:18-19

Introducción:

En este momento queremos compartir con usted algunas de las claves que nos permiten asegurar el legado. Todo cuerpo va a morir y esta declaración debe acerté consciente de tu mortalidad. De manera tal que debes tener planificada las cosas para que al momento de tu partida no se genere caos o quede comprometido el propósito. Reconocer que un día serás quitado de este cuerpo de carne, proporciona una perspectiva más clara de que debemos hacer una eficaz inversión en el legado.

Liderazgo – Jesucristo nunca construyó un edificio.

La mayoría de los líderes piensan que al construir una estructura es entonces cuando tienen algo que dejar como legado.  Pero cuando ocurre un terremoto nos podemos dar cuenta que eso no debe ser un legado. Jesucristo nunca construyó un edificio porque él construyó personas. El seleccionó a un grupo de personas y derramó Su vida en ellos. La mayor inversión en la vida es en las personas.

El verdadero liderazgo construye edificios para edificar personas.

  • Elías se enfocó en Eliseo.
  • David se centro en Salomón.
  • Jesús se abocó en Pedro.

¿Si murieras hoy que pasaría con tu legado?

Los verdaderos líderes no se enfocan en sí mismo sino en otras personas. Los buenos líderes reclutan otros líderes, pero los grandes líderes producen líderes extraordinarios (Mateo 28:18-19). 

Jesús sabía que toda autoridad le había sido dada para ser transferida y que esta promocione efectividad en sus líderes. Si Él no la deposita en los apóstoles entonces retornaría con ella a los cielos y todo terminaría ahí. El liderazgo no se mide por cuantas personas te sirven sino por cuantas personas les sirves (Mateo 20:26).

Estamos diseñados con la finalidad de servirle a otros y distribuir lo que portamos de Dios en ellos. La única persona autorizada por Dios para servirle a un hombre es su mujer. Ella es quien debe conocer los planos para saber edificar su casa. Comprenda esto… Si lo que portas al momento de tu muerte muere contigo entonces sin importar tu éxito, fuiste un fracasado.

  • Todas las cosas que has logrado.
  • Todo el conocimiento que has acumulado.
  • Todos los grandes proyectos que tienes.

Si todo esto muere cuando mueras, fallaste. La posición número uno de un ministerio es entrenamiento. Es transferir, es construir personas. La mentoría es la manifestación del más alto nivel de madurez en el liderazgo. Los verdaderos líderes siempre estarán trabajando para que las demás personas sean más grande que ellos (Juan 16:7-15).

Liderazgo – Declaración de malos LÍDERES:

  • Nunca dejare mi posición.
  • Yo soy el pastor, soy el profeta, soy el apóstol.

Entienda… llegará un día que su tiempo terminara, así que ocúpese de transferir todo lo que usted cree que es en alguien más. Los grandes líderes siempre invierten sus mejores recursos, intelecto y sabiduría en preparar personas que en su ausencia dimensionen la obra a un nivel mayor.

Jesús al tener clara su identidad pudo depositar toda su vida en los discípulos hasta el punto de expresarle que a ellos les convenía que él se fuera. Cuando un líder genuino ha edificado la vida de los que les siguen, ama llegar el momento de salir del escenario. Para dejar un legado debes ser maduro, porque un líder jamás se centra en su autopreservación o autoprotección.

Es que existen personas que les cuesta abandonar la posición porque han hecho de ella se fuente (Abba) y como no han trabajado en el relevo saben que están desprotegidos. Es peligroso cuando creemos que los bienes materiales inherentes a la posición son nuestra herencia, porque estamos afirmando que nuestra dependencia proviene de algo temporal.

Liderazgo – Más verdades:

  • La iglesia necesita líderes que no estén preocupados en protegerse a si mismos, sino proteger el legado.
  • Líderes que piensen más en las generaciones que en las posiciones.
  • La iglesia requiere líderes que no centran la atención en un don sino en la distribución del conocimiento de Dios.
  • Necesitamos líderes que estén más interesados en las personas que en ambiciones privadas.

Si inviertes en las personas, ni la muerte podrá matarte porque quedaras reflejado en ellos. Los verdaderos líderes no buscan seguidores, los seguidores se sienten atraídos por los verdaderos líderes. Cuando alguien sale a reclutar personas es un indicativo de la falta de atracción de ese liderazgo; es que cuando portas algo genuino eso hará que los demás te busquen.

Los líderes verdaderos siempre respetaran aquellos que se sometan a ellos porque esto es un privilegio. Y lo demostraran con el deseo de edificarlos, construirlos y una ardiente pasión de transferirle el legado.

Otras verdades:

El mayor fracaso de un líder es tener éxito sin éxito.

Éxito no es tener:

  • Un gran edificio.
  • Elementos tecnológicos.
  • Confort insuperable.
  • Riquezas económicas.

El éxito real es poder edificar a las personas que trabajaran y perseveraran por alcanzar el cumplimiento del propósito eterno. Cuando esto queda claro entonces todo lo demás solo representaran los medios provistos por Dios para la edificación de los santos. El edificio donde te congregas es solo un lugar de capacitación, donde Dios forma los pensamientos del corazón de la iglesia. El mejor lugar donde puede preservas aquello que Dios te ha entregado es en la gente. Usted puede producir lo que sea pero si no produces un sucesor entonces has fracasado (Génesis 15:1-3).

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