Reflexiones Cristianas
Prédica de Hoy: ¡Sin Máscaras!
Reflexiones Cristianas Lectura Bíblica de Hoy: Hebreos 4:14-16
Introducción
Nos levantamos hoy y nos pusimos una máscara. Salimos a la calle, al trabajo, a la Iglesia, a cualquier sitio con la máscara puesta.
Vivimos una vida de apariencias, fingimos perfección y hasta queremos ser ejemplares mientras ocultamos quienes somos en realidad cuando predicamos del amor y no lo vivimos, hablamos de excelencia y no la practicamos.
Solemos corregir los errores de otros, pero no los propios; porque ¡Todos somos santos cuando hablamos de los pecados ajenos! Y así salimos de casa y regresamos a ella.
Con la máscara puesta
Viajamos a cualquier parte y hacemos cualquier cosa, pero siempre con la máscara puesta, disimulando lágrimas, aparentando santidad extrema.
Nos vestimos de falsa humildad y hasta fingimos estar gozosos cuando por dentro pareciera que la vida se nos está derrumbando a pedacitos porque la cosa no es tan fácil ni tan sencilla como la pintan.
Pero aún así, insistimos portar una careta, una máscara con la que podemos engañar a nuestros semejantes, pero nunca a nosotros y mucho menos a Dios.
Hebreos 4:13 dice: “No hay cosa creada que no sea manifiesta en su presencia; antes bien todas las cosas están desnudas y abiertas a los ojos de aquel a quien tenemos que dar cuenta”.
De manera que aunque acudamos a la presencia de Dios con la máscara puesta, Él nos conoce y sólo Él sabe cuánto sufrimiento, cuánto dolor, cuánta amargura, cuántos resentimientos, cuántas cargas y cuántas luchas tenemos.
Conclusión
Él y sólo Él conoce las intenciones de nuestro comportamiento, por lo que no podemos engañarle. Con todo, Él es ese sumo sacerdote que traspasó los cielos, que se compadece de nuestras debilidades porque Él mismo fue tentado en todo según nuestra semejanza, pero sin pecado y por eso nos invita a que nos acerquemos con confianza ante su trono para alcanzar misericordia y oportuno socorro. (Hebreos 4:14-16).
Es allí, en Su presencia, donde la máscara que llevamos puesta, por muy bonita que la luzcamos, se cae. Cualquier día es bueno para acercarnos a Su presencia y quitarnos la máscara.
© Néstor Amaristha. Todos los derechos reservados.
