El poder de la alabanza

2. Alabanza – Pero si alabas, alaba en espíritu y en verdad (Juan 4:21, 23 -24)

Jesús le dice  a la mujer samaritana: “Mujer, créeme, que la hora viene cuando ni en este monte ni en Jerusalén adoraréis al Padre.” Y estamos en días donde no hay siquiera la oportunidad de ir a un templo, a una iglesia, a congregarse junto con hermanos para adorar a Dios.

Pero esto no es impedimento, esto no tiene porqué callar nuestra alabanza. Esto no tiene porqué parar nuestra adoración, porqué es necesario que el que le adore le adore en espíritu y en verdad. No importa el lugar, no importa donde te encuentres, lo que Dios ve es un corazón que en verdad, y sinceridad adora. Un corazón que está agradecido y reconoce su grandeza.

Algo sorprendente de la alabanza

¿Y sabe qué es algo sorprendente? Que Dios anda buscando adoradores que le adoren en espíritu y en verdad. Póngase usted a pensar.  Dios tiene a su alrededor ángeles que cantan con voces hermosas. Dios tiene arcángeles. Él tiene serafines y querubines que le adoran que le alaban todo el tiempo. Adoran  su nombre, glorifican Su grandeza. Pro aún así Dios espera tu alabanza y mi alabanza.

Aún así, Dios busca ese momento en el que tú vengas ante su presencia adorarle, a derramar tu alma, reconociendo Su grandeza y su poder. Dios espera, desea, y busca ese momento, en el que tú le adores en espíritu y en verdad. Él se mueve en medio de la alabanza. No importa la voz, no importa si desafinas o desentones, sólo necesitas que sea en espíritu y en verdad, y Él se manifiesta en medio de esa alabanza.

El poder de tus alabanzas 

Porque cuando tú le alabas la tristeza se convierte en gozo, cuando tú le alabas la desesperación se  transforma en paz y confianza en sus promesas, todos los temores desaparecen.

 Así que yo quiero que usted aprenda y que grabe estas palabras en su corazón, Hay poder en medio de una alabanza genuina, de una alabanza sincera. Dios  Dios se manifiesta con poder, abre puertas que están cerradas. Dios hace caminos donde no los hay (Isaías 43:16-21). Dios quebranta toda cadena, Él  hace que las murallas sean desmoronadas en medio de la alabanza (Josué 6).

Nuestro Dios es digno, de toda alabanzas Él se merece toda Gloria.

Toda honra sea Su nombre, exaltado sea Su nombre. Bendito por siempre, y para siempre, porque Él es digno. Suyo es el poder porque suya es la alabanza y la adoración. Sólo a Él le pertenece toda Gloria por los siglos de los siglos (Gálatas 1:3-5; 1 Timoteo 1:16-17).  

La Biblia dice que todo lo que respira alabe a Jehová (Salmos 150:6). Así que si usted está ahora respirando, entonces alábelo. Alabe Su grandeza, Su gran poder, y Su misericordia para con nosotros, porque Él es bueno y digno de suprema alabanza (Salmos 145:3-21).

Conclusión

Qué toda su vida, no solamente sus palabras, sino que toda su manera de vivir, toda su vida entera sea una alabanza continua a Jehová. Que todas sus acciones glorifiquen Su nombre qué es Bendito por la eternidad.

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