Bosquejos Bíblicos
Bosquejos Bíblicos Predica de Hoy: Un matrimonio cristiano
Introducción
Cuando mi esposa y yo decidimos unirnos como una sola carne, siendo cristianos, con el objetivo de servir a Dios, pasó lo inesperado. En nuestra nueva etapa nos dimos cuenta que éramos dos culturas diferentes, acostumbrados diferentes, ella de pueblo y yo de una pequeña comunidad donde era marginado de las redes sociales.
Vivimos tres años difíciles tratando de acoplarnos, pero parecía imposible ceder el uno al otro. Procreamos una hermosa hija y por algún momento pasó por nuestra mente que todo se iba a solucionar y parecía lo contrario. Estuvimos a punto de divorcio por repetitivas ocasiones hasta que Dios llego a tiempo a nuestro hogar y hoy vivimos en armonía, respeto, comunicación con mi pequeña familia. Escudriña los siguientes versículos si pasas por lo mismo. Ahí Dios se manifestó trayendo restauración y sanidad en el corazón, por ello te lo quiero compartir. Antes de iniciar es importante pedir perdón el uno al otro y dejar en claro que Dios es quien guiará sus vidas y traerá restauración.
I. No te afanes y que tus peticiones sean conocidas con ruego y oración a Dios (Filipenses 4:6-7)
En el versículo 7, vemos que la oración es una acción personal, pero también social. Es una forma de vida para nosotros y para nuestras familias.
Pero hay una manera especial de orar que se llama “oración de reconciliación” o “oración de arrepentimiento”. Esto significa pedirle a Dios que te ayude a ser humilde y amable cuando los demás hacen cosas malas contra tí o contra otros. Esto no significa que puedes ignorar las cosas malas que los demás hacen, pero sí significa que no vas a estar enojado con ellos por mucho tiempo porque sabes que tu respuesta es incorrecta.
Regresando a la analogía de Pablo, una persona que está enferma puede ser tratada por médicos con diferentes técnicas y medicamentos. Sin embargo, si ella está enferma de corazón, todos los medicamentos y técnicas serán ineficaces. La única manera de sanarla es restaurar su relación con Dios, y hacer que sus peticiones sean conocidas por Él con ruego y oración.
El problema para muchas personas es que no ven la necesidad de comunicarse con Dios. Quizá creen que la oración es sólo para orar a Dios cuando se necesita algo o para pedir perdón por nuestros pecados. Sin embargo el orar a Dios no es una cosa solitaria, sino un acto social; y lo más importante, es un acto de adoración y comunión con nuestro Padre celestial
2. El Señor ya sabe la situación de tu matrimonio (Salmo 139:3)
No hay nada oculto para Él, Dios conoce todo acerca de ti, y Él te ama (1 Juan 4:16).
El Señor ya sabe por la situación de tu matrimonio. Salmo 139:3 dice, “Y todos mis caminos te son conocidos.” Él es perfectamente consciente de todas las cosas que has hecho, y todas las cosas que pueden estar en el futuro. Él sabe quién eres y lo que Él ha creado en ti. Él sabe cuánto te gusta tu cónyugue, y lo mucho que quieres tener una vida feliz juntos.
Pero ¿cómo puede saberlo? Es una pregunta muy simple, pero la respuesta es muy compleja. Porque Él no está limitado a nuestro mundo material o físico, y por lo tanto no tiene los mismos conceptos sobre el tiempo o espacio que nosotros tenemos aquí en la tierra.
Nunca debes asumir nada. Lo que asumes es lo que obtendrás. Si haces una suposición, es como si estuvieras diciendo que Dios no puede hacer Su obra en tu vida. Lo estás haciendo mentiroso y diciendo que ha fallado en Su palabra.
El Señor conoce todas las cosas, incluso el futuro. El Señor sabe lo que está pasando en su matrimonio. Él sabe lo que sucederá si nada cambia. No tienes que preocuparte por nada de esto porque Él ya se ha encargado de eso por ti (Colosenses 1:19), pero Él quiere que confíes en Él lo suficiente como para permitirle hacer Su obra en tu vida (Proverbios 3:5-6).
3. Tener ferviente amor porque el amor cubre multitud de pecados (1 Pedro 4:8)
Hay muchos versículos en la Biblia que hablan sobre la importancia y el valor del amor. Estos versículos son poderosos y pueden guiarnos en nuestras relaciones. El amor es una de las características más importantes que Dios quiere que tengamos. La Biblia dice que “Dios es amor” (1 Juan 4:8). Esto significa que Dios vive en un estado de amor perfecto, y no quiere que vivamos de otra manera sino con este mismo tipo de amor.
Dios también es paciente, bondadoso y perdonador, lo que significa que Él nos dará este tipo de amor, incluso cuando no lo merezcamos. La Biblia dice: “Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna” (Juan 3:16). Este tipo de amor viene de Dios y si lo tenemos, podemos recibir la vida eterna a través de Jesucristo.
En 1 Pedro 4:8, se nos dice que el amor cubre multitud de pecados. Esto no quiere decir que debamos tolerar el pecado en nuestras vidas o en los demás. Más bien, significa que si tenemos una excelente relación con Dios y con los demás, será más fácil para nosotros pasar por alto sus defectos.
4. Siempre responder con sabiduría (Proverbios 15:1)
La Biblia dice que la sabiduría es más preciosa que las piedras preciosas y que siempre debemos responder con sabiduría. Cuando era joven, el rey Salomón era conocido por su sabiduría. Escribió muchos libros de la Biblia que están llenos de sabiduría, incluyendo Proverbios. De hecho, se le llama el hombre más sabio que jamás haya existido. (1 Reyes 4:30)
En Proverbios 15:1, Salomón nos anima a ser personas sabias que siempre responden con sabiduría. ¿Cómo podemos responder sabiamente? Cuando nos enfrentamos a un problema o desafío en la vida, hay varias cosas que podemos hacer para mostrar nuestra sabiduría:
- Oramos por la guía de Dios y le preguntamos qué quiere que hagamos.
- Pregunta a los demás si tienen algún consejo sobre cómo manejar la situación.
- Piense detenidamente en sus opciones antes de tomar cualquier decisión, ¡no actúe impulsivamente!
Si es posible, hable con alguien que haya pasado por una situación similar antes para que sepa qué funcionó para ellos y qué no funcionó para ellos al enfrentar el mismo problema o desafío.
5. No hay cosa mejor que alegrarse y hacer el bien (Eclesiastés 3:12-13)
La Biblia dice: “No hay para ellos cosa mejor que alegrarse, y hacer bien en su vida“. Pero ¿qué significa exactamente “alegrarse”? No es necesario ser feliz por todo lo que te sucede; sólo debes estar contento con las cosas buenas que has recibido del Señor y agradecido por ellas.
La Biblia nos dice que no hay nada mejor que alegrarse y hacer el bien. Cuando usted hace algo bueno por otro ser humano, es como si le estuviera agradeciendo a Dios por su existencia. Desde el momento en que nacemos hasta que morimos, Dios nos envía personas en nuestras vidas para ayudarnos y servirnos. La mayoría de las veces ni siquiera nos damos cuenta de cuántas personas nos benefician.
Así que aquí tenemos una de las más grandes bendiciones de la vida: la felicidad que viene de hacer el bien. Cuando trabajamos por algo que realmente nos importa, cuando vemos que nuestro esfuerzo da frutos y ayuda a otros, tenemos una gran motivación para seguir adelante. Y si somos fieles en nuestras tareas diarias, podemos estar seguros de que Dios nos recompensará en mayor medida todavía.
Conclusión
Para que el matrimonio sea más fuerte, las parejas deben comunicarse bien entre sí. La comunicación es un aspecto importante de cualquier relación, pero es especialmente importante en una relación matrimonial porque estas relaciones están formadas por dos personas con personalidades, intereses y sentimientos diferentes.
Cuando las cosas no salen como esperábamos, es importante pedir perdón el uno al otro y dejar en claro que Dios es quien guiará sus vidas y traerá restauración. ¿Irreconcilable? No. Hay arrepentimiento, perdón, salvación y restauración para todos nosotros. Sólo necesitas volverte a Dios y Él hará muchas cosas maravillosas en tu vida.
Dios te bendiga
© Valentin Araguz. Todos los derechos reservados.
