La Rebeldia – 2ª Parte

En Hechos 20:28-29 dice: “Por tanto mirad por vosotros, y por todo el rebaño que el Espíritu Santo os ha puesto como obispos…Porque yo sé que después de mi partida entrarán en medio de vosotros lobos rapaces, que no perdonaran el rebaño

La Biblia nos enseña como nosotros debemos cuidar nuestra iglesia de los ataques de Satanás:

No participando, ni aceptando conversaciones nocivas contra el liderazgo y la iglesia. Efesios 5:11 “Y no participéis en las obras infructuosas de las tinieblas, sino más bien reprendedlas”.

Desenmascarar a tiempo todas las trampas y estrategias que Satanás tiene contra su casa espiritual (2 Corintios 2:11). “Para que Satanás no gane ventaja alguna sobre nosotros; pues no ignoramos sus maquinaciones”.

Identificar, confrontar y ayudar a los antagónicos para restaurar su vida espiritual a través del liderazgo de su iglesia. (Mateo 18:15-17).

Orar diariamente por su pastor y el liderazgo de su iglesia. Efesios 6:18. “Orando en todo tiempo con toda oración y súplica en el Espíritu, y velando en ello con toda perseverancia y súplica por todos los santos”.

Que Dios nos ayude a someternos a las autoridades superiores y podamos así extender el reino bajo el mandato de Dios.

La rebeldía es un pecado de rebelión e Insubordinación.

Es la sublevación o resistencia ante alguien o algo.

En 1 Samuel 15:23 las Escrituras declaran: “Porque como pecado de adivinación es la rebelión, como ídolos e idolatría la obstinación…”

La palabra “rebelión” se traduce de la palabra hebrea meri, que significa “ser contencioso, contradictorio, discutidor, o desobediente hacia”. No hay tales cosas como pequeños pecados porque todo pecado es rebelión y obstinación.

El practicar cualquier tipo de rebelión es tan malo como participar en algún rito pagano o satánico. El practicar cualquier tipo de obstinación es tan malo como participar en la más grotesca iniquidad y rendir homenaje a un dios falso (1 Samuel 15:23).

Característica de un Rebelde:

A) El rebelde busca el mal. Proverbios 17:11
B) Un rebelde se le asocia con la mentira. Isaías 30:9
C) El rebelde no dispone su corazón para el Señor. Salmos 78:8
D) El rebelde no escucha. Ezequiel 3:27
E) El rebelde tiene ojos pero no ve. Ezequiel 12:2
F) El rebelde no hace las cosas que se le mandan. Josué 1:18
G) El rebelde no sigue el mandato de Jehová. Deuteronomio 1:26
H) Rebelde a La Palabra. Lamentaciones 1:18
I) El rebelde no escucha el consejo del Señor. Salmos 107:11

© Moreiba Cabrera. Todos los derechos reservados.

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