El Servicio a Dios

Dios demanda que le sirvamos pero esto debe ser voluntariamente debe de nacer en cada uno de nosotros el servir a Dios como Él lo pide y se lo merece. Dios no quiere nada a la fuerza por eso Él nos dejó con libre albedrío para que nosotros escogieramos servirle o no servirle.

Nuestro servicio a Dios debe ser voluntario de nosotros mismo sin que nadie nos este imponiendo nada, ni a la fuerza un servicio a Dios a la fuerza no vale Dios no lo acepta debe ser voluntario de cada uno de nosotros. Éxodo.25:2.

Dios pidió una ofrenda del pueblo, pero la pidió voluntaria de aquel cuyo corazón le fuera movido para hacerlo. Éxodo.35:5, 21, 29. Y esa ofrenda voluntaria que salía de todo corazón recto y puro sobre paso lo esperado. Éxodo.36:5-7.

El pueblo dio más allá de lo que se esperaba de ellos, pero salio de su voluntad no se le impuso cierta cantidad, porque Dios no quiere nada a la fuerza. Tenemos que servir a Dios voluntariamente de nuestra voluntad sin que nadie nos exija servirle porque sino es voluntariamente no sirve de nada servirle ya que Él no lo acepta. Sofonías.3:9.

Salomón tenía que servir a Dios voluntariamente. I Cron. 8:9. Así nosotros debemos servir a Dios voluntariamente, Dios conoce el corazón de cada uno de nosotros y Él sabe si el servicio lo estamos haciendo a la fuerza o voluntariamente.

Pablo tenía que predicar el evangelio voluntariamente. I Cor.9:16-18. Si lo hacemos de mala gana daremos cuenta a Dios.

Los ancianos en su servicio como ancianos deben hacerlo voluntariamente no de mala gana. I Ped.5:2. Porque ese es el servicio que Dios quiere, que Dios demanda un servicio voluntario que salga de nosotros no a la fuerza sino voluntariamente.

V. DEBEMOS SERVIR AL SEÑOR CON LA ACTITUD CORRECTA.

Para servir a Dios debemos de tener la actitud correcta de servirle.

Lo que Él quiere de acuerdo a su voluntad y no a la nuestra, nuestro servicio debe estar basado en su palabra no en lo que nosotros creamos. Rom.7:6. Con un espíritu ferviente. Rom.12:11.

Debemos de servirle en verdad. I Sam.12:24. La actitud correcta esta basada en la verdad de Dios, no en lo que digan los hombres, sino en solo lo que Dios diga a través de su palabra. Si nos equivocamos en la actitud de cómo servir a Dios tendremos problema con Él.

VI. DEBEMOS SER DILIGENTE EN EL SERVICIO A DIOS.

Dios demanda que seamos diligentes en su servicio, sino somos diligentes en el servicio para Él de nada nos va a servir servirle ya que Él demanda diligencia en su servicio.

Dios demandaba diligencia para el pueblo de Israel. II Cron. 29:11 Ellos no deberían de ser negligente en el servicio a Dios sino todo lo contrario debían de ser diligente en el servicio a Dios. Tenían que tener prontitud en el servicio a Dios.

Nosotros también debemos de ser diligente en el servicio a Dios. Rom.12:11. No debemos de ser perezoso sino diligente en el servicio a Dios. La diligencia es muy importante para poder servir a Dios. Un servicio sin diligencia sin prontitud no vale de nada seamos diligente en las cosas de Dios seamos prontos para las cosas que Dios nos manda.

CONCLUSIÓN:

Dios quiere que le sirvamos, es Dios quien lo demanda de cada uno de nosotros. Pero este servicio para que pueda agradar a Dios debe ser:

Con el alma y el corazón.
Debe ser solamente y únicamente a Dios.
Debe ser un servicio agradable a Él.
Debe ser un servicio voluntario.
Debe ser con la actitud correcta.
Debe ser con diligencia.

Si fallamos en cualquiera de estos puntos en nuestro servicio a Dios, Dios no aceptara nuestro servicio por muy sincero que sea, esperando en Dios que podamos dar el servicio que Dios se merece de corazón.

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