DISCRETA: No habla más de lo que necesita, ni repite nada
EJEMPLAR: Mantiene su boca en control, no habla todo el tiempo.
SENSIBLE: Cuida con sus palabras a lo otros y sabe cuando hablar a tiempo
AUTOCONTROL: Sabe manejar su boca en cada momento y es justa
BONDADOSA: Solo dirá lo que Espíritu Santo le guíe.
Como dice en este pasaje de Santiago 3:13 “¿Quién es sabio y entendido entre vosotros? Muestre por la buena conducta sus obras en sabia mansedumbre”
Comparemos brevemente la sabiduría humana y la sabiduría dada de Dios
HUMANA:
- Hablamos egoistamente, Siempre centrado en YO
- Palabras de Guerra: Atacamos o ofendemos
- Usamos impuras palabras: Usamos vocabulario soez, de doble sentido
- Decimos todo el tiempo palabras Necias: Inexperto. o Sabelotodo
DE DIOS
- Hablamos humildemente, Estamos buscando servir y dar
- Palabras de Paz: Positivas, Creativas y Fuerza
- Palabras puras: Verdaderas, buenas y a buen tiempo
- Decimos todo el tiempo palabras sabias: Alguien experto, conocedor
En este versículo también dice: “La ley de clemencia esta en su lengua“. La palabra “clemencia” es la palabra hesed que se usa comúnmente en hebreo. Clemencia su definición es- Compasión , moderación al aplicar justicia.
Misericordia su definición es: Virtud que inclina al ánimo a compadecerse de los sufrimiento y miserias ajenas. La misericordia es un atributo de Dios, es una virtud perdonar los pecados y las miserias de su criaturas.
Dispuestas a dar misericordia
Nosotras debemos estar siempre dispuestas a dar misericordia todo el tiempo y en toda situación. Cuando usamos nuestra lengua. Debemos recordar que las palabras que se dicen deben ser siempre buenas, verdaderas, amorosas, constructoras, delicadas, que dan apoyo, fuerza y mostrando el amor de Cristo en nosotras.
RECUERDA: Lo que salga por tu boca sea lleno de sabiduría y tu misericordia siempre este junto a ti.
CONECTA PRIMERO TU CEREBRO ANTES DE USAR TU LENGUA
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