Sanidad interior: ¿Quieres ser libre? Parte II

Mensajes Cristianos

Prédica de Hoy: Sanidad interior: ¿Quieres ser libre? Parte II

Mensajes Cristianos Texto Bíblico: Salmo 51:6-10 “He aquí, tú amas la verdad en lo íntimo, Y en lo secreto me has hecho comprender  sabiduría. 7 Purifícame con hisopo, y seré limpio; Lávame, y seré más blanco que la nieve. 8 Hazme oír gozo y alegría, Y se recrearán los huesos que has abatido. 9 Esconde tu rostro de mis pecados, Y borra todas mis maldades. 10 Crea en mí, oh Dios, un corazón limpio, Y renueva un espíritu recto dentro de mí“.

Propósito de Dios

Como dijimos amados hermanos; Dios tiene un propósito con cada una de nosotros y Dios quiere completar su obra (Filipenses 1:6) “El perfeccionará y completará la obra de sus manos”. Tu eres un ser único y especial, Dios cuando formaba tu vida en el vientre de tu madre Él, ya tenía tus días contados y el propósito que debías cumplir en esta vida.

Sanidad Interior es lo que cada persona necesita no solo para servir a Dios, sino para vivir una vida plena, libre de mentiras, rencores, odios, envidias, celos, lujurias etc. Efesios 4:22-24

“En cuanto a la pasada manera de vivir, despojaos del viejo hombre, que está viciado conforme a los deseos engañosos, y renovaos en el espíritu de vuestra mente, y vestíos del nuevo hombre, creado según Dios en la justicia y santidad de la verdad”.

Todos los dolores, sufrimientos, o trauma fuertes internos que has vivido, que no han sido tratados y sanados te comienza a oprimir y sale a tu exterior. Las experiencias traumáticas han podido levantar fortalezas y crear raíces de amargura en tu corazón y tu mente, y es allí donde Dios quiere sanar tu vida, si tu le permites al Espíritu Santo obrar en tu interior.

Las necesidades básicas como la alimentación, agua, abrigo deben ser correspondidas y satisfechas, Al igual que las necesidades secundarias que son amor, protección, perdón, elogios etc.

Cuando estas necesidades no han sido todas suplidas en tu vida, puedes llegar a tener complejos de inferioridad, esto te aísla, buscas la soledad apartándote de quienes te rodean, puedes llegar a la sumisión e introversión.

O lo contrario puedes mostrarte para ser visto y llamar la atención de los demás hacia ti mismo. Puedes sentir lástima de ti mismo y buscar que los demás también lo sientan. Te puedes sentir sensible o susceptible, puedes lo contrario, tener un comportamiento posesivo, agresivo o buscar el perfeccionanismo etc.

Cuando no te reconoces como eres, ni como actúas

Tenes falta de conocimiento y una falsa imagen de ti mismo y muestras una apariencia equivocada de la realidad de lo que eres. Dios quieres que seas un verdadero hijo de la luz, que resplandezcas en medio de las tinieblas. Él te hizo libre para que vivas en esa libertad por Él ganada. Juan 8:32 “Y conoceréis la verdad y la verdad os hará libres”.

A través de los mensajes cristianos y predicas cristianas aprendemos que para poder recibir Sanidad Interior a través del poder del Espíritu Santo debes reconocerte tal como eres, y reconocer tu enfermedad; si quieres ser libre.

Sanidad Interior – Sana tu identidad

Tu deber es amarte, cuidarte, y sobre todo aceptarte como eres. Debes aceptar tu cuerpo como Dios lo ha creado, sin recriminaciones, ni rechazo. (Salmo 139: 13-14) “Tu nos formaste y maravillosas son tus obras”.

Dolor y aflicción puede haber llenado tu corazón, al no aceptarte tal como Dios te ha formado y te avergüenzas en vez de sentirte bien y estar agradecido de la vida que Dios te ha regalado.

Amado tu eres único y especial no solo para Dios, sino para todos los que te aman y te rodean. No te rechaces, ni te avergüences, comienza a aceptarte, cuidarte, amarte y respetarte y verás como tu vida día a día cambia, y el gozo que obtendrás en tu alma cuando alabes a Dios por la grandeza de su obra, y reconocer que tu eres esa obra maravillosa en las manos de Dios.

Sanidad Interior – Tu concepción

Debes estar agradecido por haber sido concebido y que Dios te haya regalado el don de la vida, cualquiera haya sido tu concepción, aunque desde el vientre fuiste rechazado, aunque tu concepción no haya sido con alegría y buen augurio. Salmos 27:10 “Aunque mi padre y mi madre me dejaren, con todo Jehová me recogerá”. No importa Dios te escogió desde antes de ser concebido y a tenido su mano sobre ti, te ha guardado para que tengas vida y vivas para la gloria de su nombre.

Tu no eres producto de una casualidad. Dios tuvo en mente tu concepción y con ello tu presente y tu futuro. Él te amó con amor eterno Jeremías 31:3 “Jehová se manifestó a mí hace ya mucho tiempo, diciendo: Con amor eterno te he amado; por tanto te prolongue mi misericordia”. Dios te regaló y te guardó la vida, con un presente, un futuro y un destino para ser usada por Dios para la gloria de su nombre.